Washington, 8 may (EFE).- La presidenta de Open Society Foundations (OSF), Binaifer Nowrojee, espera que el próximo papa mantenga el compromiso con los oprimidos como parte del legado de Francisco, fallecido el pasado 21 de abril.
“Mientras el mundo llora la pérdida del difunto papa, su mensaje perdura. Honrar su legado significaría mostrar compasión a los oprimidos y desfavorecidos, y forjar un camino hacia la paz”, dijo Nowrojee en una entrevista con EFE.
La presidenta de OSF, una de las mayores organizaciones filantrópicas del mundo, fundada por el magnate George Soros, reconoció el legado del difunto papa y su compromiso con los derechos humanos, la justicia social y a favor de perdonar la deuda externa de los países en vías de desarrollo.
El próximo papa, a quien están eligiendo estos días 133 cardenales en la Capilla Sixtina, recogerá el legado a favor de los oprimidos y de inclusión de Francisco.
“El papa Francisco eligió su nombre en honor a San Francisco de Asís, quien desestimó su riqueza”, recordó la presidenta.
“Defendió la compasión y los derechos humanos, instó a todas las personas a mostrar misericordia con los pobres, refugiados, migrantes, prisioneros y víctimas de la guerra. Esto no solo es crucial para su legado, sino que, en los últimos años, cobró aún más importancia a medida que disminuía el número de líderes mundiales de conciencia”, continuó Nowrojee.
Sobre todo señaló que fue capaz de dirigirse directamente “a los gobiernos represivos” para pedir la protección de las libertades fundamentales: “la libertad de religión, la de pensamiento, la de expresión y el respeto por las opiniones ajenas”.
Sin embargo, también opinó que en algunos aspectos “pudo haber hecho más”, como por “la situación de los derechos humanos en China” o por las personas LGTBIQ+, ya que pese a que “declaró una actitud más tolerante, no aprobó el matrimonio entre personas del mismo sexo y mantuvo su oposición a las libertades reproductivas”.
El próximo papa se encontrará también con la doctrina sobre la justicia social que Francisco inició con el objetivo de condonar las deudas de los países más desfavorecidos.
“El papa Francisco habló con claridad y eficacia sobre la condonación de la deuda injusta. Gran parte de la respuesta global está por verse. Sin embargo, los líderes del Fondo Monetario Internacional y del Banco Mundial han interactuado con el Vaticano”, aseguró Nowrojee.
Aun sin sucesor, el Vaticano ya sabe que, al menos, deberá tomar la decisión de qué hacer con las semillas que Francisco dejó plantadas en este asunto.
“A finales de este año, la Comisión del Jubileo vivirá un momento importante cuando presente su informe sobre cómo reformar la arquitectura financiera internacional, junto a otras iniciativas sobre cómo abordar esta crisis. Esta es una iniciativa liderada por Francisco para conmemorar este año jubilar, situando la justicia económica en el centro de lo que la Iglesia considera un año de renovación espiritual”, añadió la presidenta de OSF.