Washington, 6 abr (EFE).- Los ministros de Exteriores del G7 expresaron este domingo en un comunicado su “profunda preocupación” por las crecientes maniobras militares de China en torno a Taiwán y pidieron un “diálogo constructivo” para resolver las diferencias entre Pekín y Taipéi.
“Estas actividades cada vez más frecuentes y desestabilizadoras están aumentando las tensiones entre ambos lados del Estrecho y ponen en riesgo la seguridad y la prosperidad mundiales”, declararon los ministros de Alemania, Canadá, el Reino Unido, Estados Unidos, Francia, Italia y Japón, así como la alta representante de la Unión Europea (UE).
Los países del G7 señalaron su “interés en preservar la paz y la estabilidad en el estrecho de Taiwán” y apuntaron su oposición a “cualquier acción unilateral que amenace dicha paz y estabilidad, incluso mediante la fuerza o la coerción”.
“Los miembros del G7 siguen alentando la solución pacífica de los problemas mediante un diálogo constructivo a través del Estrecho”, expresaron.
Esta semana, el Ejército chino realizó maniobras militares en torno a Taiwán que incluyeron ejercicios con fuego real de largo alcance en el mar de China Oriental.
Estas maniobras, denominadas ‘Strait-Thunder 2025A’ (‘trueno del estrecho’), incluyeron bloqueos navales, ataques de precisión contra instalaciones clave y lanzamientos de proyectiles en una zona cerrada del mar de China Oriental, a unos 400 kilómetros de la isla, según detalló el Ministerio de Defensa de Taiwán.
Los ejercicios tuvieron lugar semanas después de que el presidente taiwanés, William Lai, tachado de “independentista” y “alborotador” por las autoridades chinas, definiese a China como una “fuerza externa hostil” y anunciase iniciativas para frenar las operaciones de “infiltración” de Pekín contra la isla.
Taiwán, que se gobierna de forma autónoma desde 1949, es vista por Pekín como una “parte inalienable” del territorio chino y no descarta el uso de la fuerza para concretar la “reunificación” de la isla y el continente.