Nueva York, 16 ene (EFE).- El alcalde de Nueva York, Eric Adams, propuso hoy un nuevo presupuesto para la ciudad de 109.400 millones de dólares, con menos recortes de los anticipados y un optimismo que se aleja de sus continuas advertencias sobre la crisis fiscal derivada de la acogida de miles de inmigrantes en los últimos meses.
No obstante, el alcalde, al presentar esta propuesta que deberá someterse a votación antes de entrar en vigor el próximo julio, advirtió que la ciudad no está “fuera de peligro” e insistió en que necesita fondos de los Gobiernos federal y estatal para hacer frente a los crecientes costes relacionados con la migración.
Nueva York ha recibido desde la primavera de 2022 a unos 170.700 inmigrantes, de los que más de 68.000 están bajo cuidado de la Administración local, que les proporciona albergue, comidas, servicios médicos y legales y educación para los niños.
Adams destacó que la brecha presupuestaria para el año fiscal 2025 ha llegado a un “nivel récord” debido a la creciente crisis migratoria, el fin de los fondos de estímulo por la covid-19, la ralentización en los ingresos fiscales y los contratos laborales inestables que, argumenta, heredó su Gobierno.
Afirmó que la ciudad tomó medidas para presentar un presupuesto equilibrado y estabilizar las finanzas sin acometer despidos, aumentar de impuestos o interrumpir servicios, como había advertido, lo que se suma a unos ingresos mejores de lo esperado que han permitido invertir en seguridad pública, calidad de vida y juventud.
Adams ha tomado otras medidas como reducir la estadía de los inmigrantes en los albergues y sufragar el coste del viaje a los que quieren continuar su camino a otros estados con miras a reducir así los gastos de la ciudad.
Más del 60 por ciento de los que entraron al sistema de albergues ya salieron del cuidado de la ciudad, comentó.
Igualmente destacó hoy que la ciudad tomó acciones relacionadas con vivienda y alimentación para inmigrantes, que llevará a reducir el gasto de 12.250 millones a 10.600 millones entre los años 2023 y 2025.
El pasado noviembre Adams anunció que recortaría fondos a agencias de la ciudad de cara al nuevo presupuesto, incluyendo los departamentos de la policía, de limpieza y parques, pero después dio marcha atrás y los consideró exentos de recortes, igual que al departamento de bomberos, por seguridad pública.
Los recortes anunciados en noviembre también implicaban una reducción de un 20% de los fondos que se están invirtiendo en los inmigrantes recién llegados, algunos enviados desde Texas y otros por cuenta propia desde otros estados.
Esta mañana, la gobernadora del estado, Kathy Hochul, anunció también su propuesta de presupuesto, de 233.000 millones, que incluye 2.400 millones de dólares para que la ciudad gestione su crisis migratoria, lo que supone un incremento de 500 millones con respecto al año pasado.