Santa Clara (EE.UU.), 1 jul (EFE).- El técnico de Brasil, Dorival Júnior, y el portero Alisson se mostraron este lunes favorables a tener un control estricto del tiempo de los descansos en la Copa América de Estados Unidos, lo que ha generado sanciones a varios seleccionadores, pero con cierta “flexibilidad”.
“Es necesario dar una respuesta a una organización mínima, que es necesaria. El fútbol necesita organización. ¿Es posible hacer algunos ajustes? Sí, pero lo más importante es cumplir y respetar los horarios”, señaló el preparador de la Canarinha, en la rueda de prensa previa al partido contra Colombia, en Santa Clara (California).
Dorival admitió que la llegada y el retorno a los vestuarios está siendo “un poco complicado” porque “a veces” las distancias hasta el terreno de juego “son muy largas”, si bien señaló que están intentando cumplir con dicha determinación.
Por su parte, Alisson expuso que “tal vez sea el momento de crear una rutina y una disciplina” en relación a las competiciones de la Conmebol.
“Eso es beneficioso. Hay que cumplir con los horarios, pero al mismo tiempo en el fútbol la flexibilidad es positiva. Puede mejorarse en algunos puntos, pero no ayuda mucho venir aquí a la sala de prensa y criticar o lamentarse”, manifestó.
En este sentido, abogó por el diálogo entre todas las partes implicadas (Conmebol, federaciones y jugadores) para solucionar los problemas antes de que aparezcan.
“Son cosas que tienen solución, espero que se haga siempre de la mejor forma para el espectáculo”, añadió.
La postura de Dorival y Alisson contrasta con la transmitida en la víspera por el centrocampista Bruno Guimarães, quien consideró que “la Conmebol tiene cosas más importantes de las que preocuparse” que medir los tiempos en el intervalo con un cronómetro.
La rigurosidad de la Conmebol, organizadora de la Copa América, con los tiempos ha acarreado suspensiones de un partido a los técnicos de Argentina, Lionel Scaloni; Chile, Ricardo Gareca; Venezuela, Fernando Batista; y Uruguay, Marcelo Bielsa, por reiteración en el “ingreso tardío a la cancha”.
El seleccionador sancionado, además de no poder dirigir a su equipo en el siguiente partido, tampoco puede participar en las ruedas de prensa oficiales previa y después del partido.