Washington, 9 jul (EFE).- El ministro de Asuntos Exteriores sueco, Tobias Billström, afirmó este martes que sería impensable concebir la existencia de la Organización del Tratado del Atlántico Norte (OTAN) sin Estados Unidos, pero es necesario fortalecer el pilar europeo de la Alianza ante un posible nuevo mandato de Donald Trump.
“Una OTAN sin Estados Unidos es impensable (…) gran parte no sólo de la credibilidad sino de la estructura de la Alianza depende de la presencia estadounidense”, apuntó en un foro en el centro de pensamiento Fondo Carnegie para la Paz Internacional, que se ha celebrado en los márgenes de la cumbre de la OTAN que arranca hoy en la capital estadounidense.
Billström respondió así a si la organización tiene “un plan B” si Donald Trump (2017-2021) gana las elecciones estadounidenses del próximo noviembre y reconoció que, ante esta posibilidad, hoy es necesario “fortalecer un pilar europeo en la OTAN”.
El ministro de uno de los últimos países en adherirse a la Alianza -que se formalizó el pasado marzo- animó a los países a estar “a la altura de los compromisos” y alcanzar el 2 % de inversión de su PIB en gasto militar. Hasta 23 aliados invierten ya esa cifra, mientras que hace diez años, cuanto se fijaron esa meta, eran solo tres.
La relación de Trump, quien se batirá en las elecciones presumiblemente contra el presidente Joe Biden, con la OTAN ha sido complicada. El magnate neoyorquino dijo en febrero que alentaría a Rusia a hacer “lo que le dé la gana” con los miembros que no cumplan el objetivo de gasto en Defensa de la Alianza.
Además, los republicanos en el Congreso bloquearon durante meses la aprobación de más ayuda militar para Ucrania, enarbolando el lema trumpista de “Estados Unidos primero”.
Aunque es improbable que Trump pudiera sacar a Estados Unidos de la OTAN, en virtud de una ley aprobada hace unos meses por el Congreso estadounidense, si llega al poder sí podría influir fuertemente en el futuro de la Alianza, como en las contribuciones estadounidenses a la misma.
Billström afirmó que, en este contexto, otro de los retos de la OTAN es “reconocer que Estados Unidos también tiene problemas de seguridad” distintos a los de Europa, ya que “la agresión de Rusia contra Ucrania se produce en el continente europeo”.
“Debemos tener en cuenta el Indo-Pacífico y el hecho de que debe reconocerse como parte de las preocupaciones y dolores de cabeza de la OTAN”, afirmó, ya que “si quieres un socio que se comprometa con tus problemas claves, tienes que mostrar preocupación” por sus intereses.
“No piensen ni por un minuto que Estados Unidos quiere una presencia militar europea; Estados Unidos puede manejar esto. Pero quieren asistencia política, quieren reconocimiento político del problema que China plantea”, agregó.
El pueblo estadounidense, añadió, está “más preocupado por la amenaza que representa China que por Rusia por razones obvias”.
Este martes comienza en Washington la cumbre que conmemora el 75 aniversario de la Alianza, en un momento clave en el que el grupo reafirmará su apoyo a largo plazo a Ucrania, con Rusia intensificando sus ataques contra objetivos civiles ucranianos.