Washington, 18 jul (EFE).- El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, no ha cambiado su promesa de tratar como un “paria” a Arabia Saudí, tras su reciente viaje al reino y su encuentro con el príncipe heredero Mohamed bin Salmán, al que Washington acusa del asesinato del periodista Jamal Khashoggi, afirmó este lunes la Casa Blanca.
La portavoz del Gobierno estadounidense, Karine Jean-Pierre, dejó claro en su comparecencia diaria ante la prensa que el mandatario demócrata mantiene las declaraciones que hizo al respecto a pesar de ese controvertido desplazamiento, que la semana pasada le llevó también a Israel.
En Arabia Saudí, Biden participó el viernes en una reunión del Consejo de Cooperación del Golfo (CCG) con otros países, donde se sentó al lado del Bin Salmán, que hizo de anfitrión.
El encuentro fue precedido por el saludo entre ambos, que consistió en un choque de puños, cuya repercusión internacional fue inmediata.
En su campaña electoral de 2020, Biden se había comprometido a tratar a Arabia Saudí como un “paria” en la escena internacional y a hacer pagar a sus líderes un “precio” por el asesinato de Khashoggi en octubre de 2018 en el consulado saudí en Estambul.
El presidente estadounidense “fue muy claro sobre lo que pensaba de la muerte y asesinato de Jamal Khashoggi. Lo mencionó al principio de su encuentro”, dijo Jean-Pierre, para quien es “importante tener conversaciones francas y directas” con otros líderes en materia de valores y derechos humanos.
Biden afirmó en su gira que no se arrepentía de haber prometido en la campaña que trataría al país como “un paria”: “No me arrepiento de nada de lo que dije. Lo que le pasó a Khashoggi fue atroz”, sostuvo.