Buenos Aires, 12 may (EFE).- Anualmente 14 millones de adolescentes entre 15 y 19 años viven un embarazo no deseado en el mundo, de las que 2 millones son de América Latina y el Caribe, por lo que urge adoptar políticas para garantizar el acceso a métodos anticonceptivos, advirtió este jueves un especialista.
“Si todas las mujeres usaran anticonceptivos, se reducirían, por ejemplo, 1,2 millones de embarazos no deseados por año y habría 43 % menos de abortos inducidos”, dijo en conferencia de prensa el especialista en salud femenina Germán González.
El experto, quien participó en un foro que reunió a profesionales y periodistas de salud, detalló que en América Latina y el Caribe la tasa de embarazo no deseado es de 69 por cada 1.000 mujeres de 15 a 49 años.
Latinoamérica tiene la segunda tasa más alta de embarazo adolescente en el mundo, con alrededor de 18 % de los nacimientos correspondientes a menores de 20 años.
Mientras que México ocupa el primer lugar a nivel mundial en embarazos en adolescentes entre las naciones de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), con una tasa de fecundidad de 77 nacimientos por cada 1.000 adolescentes de 15 a 19 años de edad.
Explicó que, de acuerdo con una encuesta, en Latinoamérica poco más de 57.000 mujeres aceptaron no utilizar anticonceptivos, de las que más de 23.000 resultaron con embarazo no deseado.
Ante ello, dijo, existen opciones anticonceptivas modernas que podrían mejorar los números de esta problemática.
Entre estas opciones están los métodos tradicionales de corta duración, como el copito interrumpido, el ritmo, el diafragma, la copa cervical y el condón masculino, que es el más usado en Latinoamérica.
“Sin embargo, una de las desventajas de este método es que se presentan 18 o más embarazos por cada 100 mujeres al año”, precisó.
Mientras que los de corta duración, como las pastillas, el parche anticonceptivo, el anillo vaginal y la inyección, tienen tasas de 6 a 9 embarazos por cada 100 mujeres al año.
El experto afirmó que las opciones de larga duración como el dispositivo intrauterino, el implante subdérmico, la esterilización y el sistema intrauterino tienen una tasa de 1 embarazo por cada 100 mujeres al año.
No obstante, lamentó que en la región exista todavía una baja tasa del uso de anticonceptivos.
“La dificultad en la cobertura anticonceptiva es que los gobiernos no se han preocupado por crear políticas para públicas para prevenir esta problemática porque están enfocados en otros intereses”, indicó.
Es por ello que, dijo, es indispensable que se enfoque de manera diferente el abordaje de esta problemática en países como México, uno de los países con las tasas más altas de embarazo adolescente en el mundo.
Asimismo, exhortó, se debe trabajar en acabar con los mitos sobre los anticonceptivos, como que generan infertilidad o provocan subidas de peso o acné, ya que algunas opciones pueden ser utilizadas desde que la mujer inicia su vida sexual activa.
Aunque siempre se debe consultar con un especialista para conocer cuál es el más adecuado para cada quien, advirtió.