David Villafranca
Nueva York, 17 ene (EFE).- Una nueva liga de 3×3 durante el descanso de la WNBA. Breanna Stewart y Napheesa Collier -oro olímpico en los pasados Juegos de París 2024, al derrotar a Francia en el partido que cerró los mismos- como impulsoras y con una larga lista de estrellas en la cancha. Unrivaled abre sus puertas con el baloncesto femenino viviendo una luna de miel en EE.UU. pero con la llamativa ausencia de Caitlin Clark.
Tras una temporada histórica en la WNBA con récords de audiencia televisiva y asistencia a los estadios, el baloncesto femenino en EE.UU. afronta este viernes lo que se espera sea otro punto de inflexión con el lanzamiento de Unrivaled, una nueva liga de invierno de 3×3.
Dos pilares de la WNBA como Breanna Stewart (New York Liberty) -tres oros en el 5×5- y Napheesa Collier (Minnesota Lynx) -doble campeona olímpica- se dieron la mano en este ambicioso proyecto que aspira a llenar el vacío durante los meses de descanso de la WNBA, que dejaban a los fans sin partidos y a las jugadoras con las maletas en la puerta para competir en otros países.
Por ejemplo, el quinto y último partido de las Finales de la WNBA, en las que precisamente se coronaron las Liberty de Stewart ante las Lynx de Collier, se jugó el pasado 20 de octubre, pero la nueva temporada no arrancará hasta el 16 de mayo, casi siete meses después.
Así, Univaled ofrecerá una alternativa a partir desde este viernes 17 de enero con una competición que durará diez semanas en Miami (EE.UU.) incluyendo el 'playoff' y un torneo de 1×1 y con 36 jugadoras divididas en seis equipos. La final de esta primera edición se disputará el 17 de marzo.
De la WNBA a Unrivaled
Hay dos poderosas razones económicas detrás de Unrivaled: la históricamente precaria situación de la WNBA y el 'boom' que vivió el pasado curso potenciado, entre gran medida, por el desembarco de Caitlin Clark, la máxima anotadora de la historia del baloncesto universitario y todo un fenómeno deportivo en EE.UU.
Por un lado, el convenio actual de la WNBA sitúa en 249.244 dólares el sueldo máximo para una jugadora en 2025, una cifra muy baja dentro del contexto del deporte profesional en EE.UU.
De ahí que muchas jugadoras -estrellas incluidas- viajaran durante los meses sin WNBA a Europa, donde las figuras podían recibir sueldos muy superiores. En ese contexto, Unrivaled aspira a ofrecer una opción de competición y retribución en casa.
Asimismo, no hay que obviar que Unrivaled llega justo después de una campaña de enorme éxito en la WNBA, y de excepcional repercusión tanto mediática como entre los fans, coronada por un nuevo acuerdo televisivo que le dará a la liga 2.200 millones de dólares (200 millones por temporada) dentro del pacto de la NBA de 76.000 millones en total por once años.
Por eso, el sindicato de la WNBA optó recientemente por ejercer su cláusula de salida para que el convenio termine en octubre de 2025 en lugar de 2027. Una de las razones parece evidente: aumentar la parte de pastel que se queden las jugadoras por el crecimiento de la liga y el nuevo acuerdo de televisión.
Jugadoras como propietarias
Concebida por jugadoras y para las jugadoras, Unrivaled se presenta como una competición que quiere mimar a sus figuras y darles un papel importante dentro y fuera de las canchas.
“Entrenamos, usamos la sala de pesas, creamos nuevos vínculos y amistades, recibimos tratamiento y masajes, usamos la sauna, nos dan dos comidas al día y luego un facial antes de terminar el día?? Sí, me encanta estar aquí”, escribió recientemente Angel Reese en X.
No se trata solo de detalles del día a día, ya que Unrivaled promete “el sueldo de media más alto en la historia del deporte femenino profesional”. Además de salarios, cada una de las 36 jugadoras recibió acciones de la liga para que sean protagonistas en la cancha y propietarias de la liga al mismo tiempo.
“Durante años, las mujeres han dependido fuertemente de los patrocinios fuera de la pista para una mayoría de sus ingresos”, explicó Stewart en un comunicado.
“Con Unrivaled, estamos revolucionando el baloncesto priorizando inversiones en nuestra estrellas y asegurando que su actuación en la pista se refleje en su retribución”, añadió.
Para el lanzamiento, la nueva liga cuenta con inversores de renombre en el deporte como Coco Gauff, Alex Morgan, Megan Rapinoe, Carmelo Anthony, Steve Nash, Michael Phelps o Giannis Antetokounmpo.
TNT se encargará de emitir los partidos de Unrivaled, que cuenta entre sus patrocinadores con compañías como Samsung Galaxy, Ally Financial, Miller Lite, Sephora, State Farm, Sprite, Under Armour o Wilson.
Un catálogo estelar… sin Caitlin Clark
El pasado noviembre se presentaron los seis equipos de Unrivaled, que están repletos de nombres en mayúsculas de la WNBA.
Así, Stewart es la capitana de las Mist mientras que Collier liderará a las Lunar Owls.
El resto de conjuntos estarán encabezados por Chelsea Gray (Las Vegas Aces), que estará al frente de las Rose; por Alyssa Thomas (Connecticut Sun), al mano de las Laces; por Satou Sabally (Dallas Wings), al timón de las Phantom; y por Arike Ogunbowale (Dallas Wings), que marcará el ritmo de las Vinyl.
No serán las únicas figuras de una liga que, entre otros nombres, también contará con Kelsey Plum y Jackie Young (Aces), Sabriona Ionescu y Courtney Vandersloot (Liberty), Aliyah Boston (Indiana Fever), la mencionada Angel Reese (Chicago Sky), Brittney Griner y Kahleah Copper (Phoenix Mercury), Kayla McBride y Courtney Williams (Lynx), Jewell Loyd (Seattle Storm), Rhyne Howard (Atlanta Dream), Dearica Hamby (Los Angeles Sparks), etc.
Tres son quizá las ausencias más llamativas de esta primera temporada. Por un lado no estará A'ja Wilson (Aces) -que en París repitió el oro olímpico que había ganado con el 'US Team' en Tokio-, tres veces MVP de la WNBA (2020, 2022 y 2024). Tampoco participará en 2025 Paige Bueckers, la última sensación del baloncesto universitario pero que ya tiene un acuerdo con Unrivaled para unirse más adelante.
No obstante, el nombre más llamativo que no estará en el estreno de la liga es el de Caitlin Clark, que no se ha apuntado a esta primera temporada pese a que medios estadounidenses apuntaron que Unrivaled le había ofrecido más de un millón de dólares por esas diez semanas en Miami.
En cualquier caso, no se descarta que Clark se una a Unrivaled en posteriores temporadas.