Arlington (EE.UU.), 5 jul (EFE).- Una marea vinotinto aguantó un fuerte chaparrón mientras esperaba que abrieran las puertas del AT&T Stadium de Arlington (Texas), donde la noche de este viernes su selección se enfrentará con Canadá en los cuartos de final de la Copa América.
El asfixiante calor del verano texano que se ha hecho sentir en los días previos dio una tregua en forma de agua a pocas horas del partido, programado para las 20.00 hora local (01.00 GMT del sábado).
Los hinchas venezolanos, con sus uniformes vinotinto y con el lema ‘Mano tengo fe’ en boca de todos, comparecieron prácticamente solos en Arlington, donde los aficionados de Canadá que se dejaban ver podían contarse con los dedos de las manos.
De ganar el partido, Venezuela igualaría su mejor resultado histórico en el fútbol de selecciones: unas semifinales de Copa América.
Además lo haría en un 5 de julio, día que se conmemora la declaración de independencia venezolana.
Los hinchas con las costosas entradas que se refugiaban como podían de la lluvia contrastaban con sus compatriotas que aprovecharon el partido para vender camisetas y banderas de la selección en los semáforos de los alrededores.
Dos caras de la diáspora venezolana que en los últimos años ha llegado en masa a Estados Unidos.
Venezuela será local hoy en Texas, aunque muy difícilmente pueda llenar el AT&T Stadium de Arlington, el hogar de los Dallas Cowboys de la NFL que, con 80.000 sillas, es el estadio más grande del torneo.
Eso sí, ni jugadores ni aficionados sabrán si la lluvia sigue cuando arranque el partido, ya que el AT&T Stadium es techado, lo que también lo protege del calor.