Los Ángeles (EE.UU.), 7 mar (EFE).- Con una camiseta de púrpura y oro con el número 16 y su nombre en todos y cada uno de los asientos del estadio, Los Ángeles celebró este martes el legado de Pau Gasol, cuyo dorsal fue retirado por Los Angeles Lakers.
Horas antes del tributo, que tuvo lugar en el descanso del encuentro entre Lakers y Grizzlies, la imagen del Crypto.com Arena (el nuevo nombre del Staples Center) era impactante con miles de camisetas de Gasol dispuestas perfectamente en las gradas.
Era un día muy especial para la franquicia angelina, pero ni Gasol pudo con una tradición totalmente asentada en una ciudad con un tráfico infernal: llegar tarde a los partidos ya sean de baloncesto, béisbol o fútbol americano.
Así, cuando empezó el encuentro, había poco más de media entrada, pero conforme avanzó el partido siguió llegando gente hasta casi prácticamente llenar el pabellón.
Uno de los precavidos y que llegó con la antelación necesaria fue Al, que presumió en declaraciones a Efe de ser fan de los Lakers “desde hace 35 años” y que se hacía fotos a pie de pista con su camiseta de Gasol.
“Que te retiren la camiseta es el honor más grande”, apuntó este seguidor angelino al subrayar que el español simplemente se lo merece por ser “un doble campeón” con los Lakers.
Al margen de sus méritos como jugador, Al también ensalzó la “personalidad” de Gasol: “Es muy humilde”.
De mucho más lejos, concretamente desde Mallorca (España), llegó a la ciudad californiana David Segura, ganador de un sorteo benéfico de Gasol Foundation para estar en este momento irrepetible para el baloncesto español.
Acompañado por su hermana Verónica, David, con una sonrisa de oreja a oreja, contó que habían sido “unos días muy intensos” y emocionantes para ellos.
“Conocer a Pau, estar en el Staples Center, ven cómo se retiran las camisetas, alucinar con que todo el estadio tiene una camiseta… Muestra lo que es: un jugador increíble”, opinó.
“Se lo merece por todo lo que generó con Kobe: los dos anillos y tres Finales de la NBA consecutivas”, añadió.
Junto a las camisetas de Gasol también se vieron muchas otras en el estadio con el nombre de Kobe Bryant, su ‘hermano’ y con quien formó una dupla letal en la cancha e indisoluble fuera de ella.
Ya durante el partido, los fans de los Lakers (con algunas figuras entre ellos como el actor Adam Sandler o la banda Red Hot Chili Peppers) recibieron con una gran ovación de pie a Gasol cuando entró al estadio entre el primer y el segundo cuarto, un momento muy emocionante ante el que el exjugador no pudo evitar las lágrimas.
Y ya con su camiseta descubierta en lo más alto del pabellón y totalmente conmovido, le tocó a Gasol devolver el amor a esta impresionante “marea dorada”.
“A la ciudad de Los Ángeles, a ‘la nación de los Lakers’: os quiero profundamente, os quiero para siempre. Gracias por hacerme sentir tan especial”, dijo.