Nueva York, 3 ago (EFE).- La reforma de libertad bajo fianza aprobada en 2019 en Nueva York evitó en los dos primeros años en vigor (2020-2022) que 24.400 personas, acusadas de delitos menores y graves no violentos, fueran a la cárcel y significó un ahorro de 104 millones de dólares que sus familias no tuvieron que pagar, según indica un estudio.
Esas personas que quedaron en libertad no volvieron a ser detenidas y entre ese grupo había 5.200 hispanos. “Gracias a la reforma más de 200 familias hispanas por mes no tuvieron que enfrentarse a una fianza para mantener su libertad”, señala el informe “Libertad, luego la prensa” de la organización Fwd.US Educational Fund, fundada por el empresario Mark Zuckerberg.
El informe, de junio de este año y que rechaza que la reforma esté vinculada con el alza en delitos, analiza cómo la cobertura de los medios en inglés influyó en la opinión pública y en los cambios a la ley luego de que fue aprobada la reforma en 2019.
También identifica las formas en que los medios de comunicación en español han influido igualmente en la opinión pública.
Antes de la reforma había más de 13.000 personas detenidas en este estado, con un sistema de justicia que “estaba en crisis”, señala la autora del estudio, Alana Sivin, directora en Nueva York de FW.US, que busca que haya cambios en políticas que creen oportunidades para la gente.
Así, se permitía a los jueces exigir a cualquier persona acusada de cualquier delito que pagara una fianza para obtener su libertad provisional, y en caso de no tener dinero, podían pasar días, meses y a veces años tras las rejas a la espera de su cita con el tribunal.
“Todos estos beneficios de la reforma (dólares ahorrados, decenas de miles de personas en casa en lugar de pasar meses en las celdas de la cárcel) se lograron sin comprometer la seguridad pública”, asegura FW.US.
La reforma, criticada por el alcalde Eric Adams que enfrentó casos de violencia por armas en la ciudad tras tomar posesión de su cargo, ha tenido sin embargo cambios “innecesarios” tras su aprobación, como resultado, según el estudio, de la presión que ejercieron sus opositores de lo que se hizo eco los medios.
“Tiene mucho sentido que personas en la ciudad y el país se preocupen por el crimen y hemos visto aumentos desde la pandemia en Nueva York y otras partes del país, en estados que han tenido reformas penales y en otros donde no lo ha habido, pero la realidad es no tiene nada que ver con la reforma a la fianza”, afirmó Sivin.