Washington, 23 may (EFE).- El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, se mostró convencido este viernes, tras amenazar horas antes a la Unión Europea (UE) con aplicarle aranceles del 50 %, de que el bloque no tendrá que soportar finalmente el gravamen porque “lo que harán es enviar sus empresas a Estados Unidos y construir sus plantas”.

Al ser preguntado durante un acto en el Despacho Oval de la Casa Blanca sobre su nueva amenaza arancelaria contra los veintisiete, y sobre el objetivo que persigue con un impuesto aduanero del 50 % Trump dijo que “no habrá aranceles, porque lo que harán es enviar sus empresas a Estados Unidos y construir su planta”.

“Estoy seguro de que ahora la UE quiere llegar a un acuerdo con todas sus fuerzas, pero simplemente no lo hacen bien”, dijo Trump horas después de amenazar con subir, a partir del 1 de junio, el arancel del 10 % que mantiene sobre los productos europeos en cuarenta puntos porcentuales argumentando que las conversaciones con Bruselas “no están yendo a ningún lado”.
Trump respondió “no lo sé” al ser preguntado sobre qué debe hacer la UE para evitar un gravamen del 50 % y dijo que “a día de hoy va a suceder el 1 de junio”.
El presidente estadounidense volvió a decir que Europa pone impedimentos a la entrada de bienes estadounidenses, como los automóviles, y que su país sí permite la entrada de vehículos europeos, y que “es hora de jugar a este juego de la manera en la que yo sé jugar”.
Trump también volvió a cargar contra las demandas presentadas en Europa contra grandes empresas estadounidenses como Apple.
“Usan esto como arma, y en realidad lo usan para recaudar fondos. Es casi como un mecanismo de recaudación de fondos. Y a eso hay que sumarle que aplican aranceles no monetarios y muchas otras medidas comerciales”, afirmó el magnate neoyorquino.
Desde que retornó a la Casa Blanca en enero, Trump ha puesto el punto de mira especialmente a China y la UE en materia comercial.
Después que el 9 de abril el republicano anunciara una “tregua” en la aplicación de lo que llama “aranceles recíprocos” sobre Bruselas y otros socios comerciales, la UE decidió pausar también la activación de represalias y hace unos días ambas partes habían acordado intensificar las negociaciones técnicas para llegar a un acuerdo.