Miami, 1 jul (EFE).- “Bonnie”, la segunda tormenta tropical de este año en el Atlántico, se fortaleció ligeramente este viernes al subir sus vientos máximos a 75 km/h y arroja ya intensas lluvias sobre zonas del sur de Nicaragua y norte de Costa Rica, adonde llegará esta noche.
El sistema puede también causar inundaciones repentinas y deslizamientos de lodo en algunas partes de estos dos países centroamericanos, indicó un boletín emitido a las 17.00 horas (21.00 GMT) por el Centro Nacional de Huracanes (NHC) de EE.UU.
“Bonnie”, que empezó su trayectoria en la parte sur de las islas de Barlovento y siguió por el Caribe cerca de las costas de Venezuela y Colombia, se encuentra a unas 100 millas (160 km) al este-sureste de Bluefields (Nicaragua) y se desplaza hacia el oeste con una velocidad de traslación de 17 mph (28 km/h).
Según la trayectoria pronosticada por el NHC, con sede en Miami (Florida), el fenómeno meteorológico “se moverá hoy a través del sur de Nicaragua y el norte de Costa Rica”, para emerger sobre el Océano Pacífico oriental el sábado.
A continuación, avanzará mar adentro pero en paralelo a las costas de El Salvador, Guatemala y sur de México de sábado a lunes con vientos posiblemente reforzados.
Hay varios avisos y órdenes de vigilancia por el paso de este sistema para zonas de Nicaragua, Costa Rica y la isla colombiana de San Andrés.
El más importante es una vigilancia de huracán (paso del sistema en 12 a 24 horas), que abarca desde la frontera de Nicaragua y Costa Rica hasta la laguna de Perlas, en el primero de los dos países.
La costa del Pacifico de El Salvador, Guatemala y el sur de México deben monitorear el progreso de este sistema, advirtió el NHC.
También puede producir una marejada ciclónica, con una subida del mar de 1 a 3 pies por encima de los niveles normales de marea en el área donde toque tierra, añadieron los meteorólogos.
La tormenta tropical producirá fuertes lluvias en sectores de Nicaragua y Costa Rica hasta el sábado de hasta 12 pulgadas (30 centímetros) en zonas localizadas, lo que puede ocasionar “inundaciones repentinas y deslizamientos de tierra amenazantes para la vida humana”.
En lo que va de la actual temporada ciclónica en el Atlántico, que se inició el 1 de junio y, según los servicios meteorológicos, va a ser más activa de lo normal, se ha producido además otra tormenta con nombre, Alex, que se formó el 5 de junio cerca de la península de Yucatán con los remanentes del huracán Agatha, el primero formado este año en el área del Pacífico.
Alex causó lluvias en Yucatán, el occidente de Cuba y el sur de Florida.