Miami, 12 jul (EFE).- Jorge Murillo, de 69 años, se declaró culpable en una corte federal de Miami (Florida) de importar a Estados Unidos más de 300.000 kilos, equivalentes a 1,5 millones de dólares, de un refrigerante chino ilegal, informó este martes la Fiscalía federal del Distrito Sur de Florida.
Murillo, quien fue residente en el sur de Florida, había sido detenido en Miami en mayo de este año por la importación en 2007 de HCFC-22 (hidroclorofluorocarbono-22), un refrigerante de uso residencial que se utiliza en sistemas de aire acondicionado y bombas de calor.
De acuerdo a la Fiscalía del Distrito Sur de Florida, el hombre violó la Ley de Aire Limpio (CAA, en inglés) al ingresar a Estados Unidos el citado refrigerante que es considerado por las autoridades federales como una “sustancia que agota la capa de ozono”, y por lo mismo ha establecido pautas y un cronograma para eliminar de forma gradual su producción e importación.
Según la Fiscalía, el HCFC-22 figura entre las sustancias y productos que afectan la capa de ozono y que estarán totalmente prohibidas a partir de 2030.
El detenido y su cómplice, Norberto Guada, negociaron con un fabricante chino e introdujeron a través de puertos en el sur de Florida “grandes cantidades de HCFC-22″ para vender en el mercado negro”, todo ello sin contar con excepciones que les permitieran la importación legal, señaló la Fiscalía.
Entre junio y agosto de 2007 ambos ingresaron de contrabando 309.536 kilogramos de HCFC, con un precio de mercado de 1.525.670 dólares.
Ambos fueron acusados en 2012, año en que Murillo empezó a residir fuera del país hasta su captura este año, mientras que Guada ese mismo año fue sentenciado y desde entonces se halla en una prisión federal.