Washington, 10 ago (EFE).- Congresistas republicanos solicitaron este miércoles la comparecencia de la responsable de los Archivos Nacionales de EE.UU., Debra Steidel, para que aclare si tiene alguna relación con la redada del FBI en una mansión del expresidente Donald Trump (2017-2021).
En una carta enviada a Steidel, los republicanos miembros del Comité de Supervisión de la Cámara Baja le pidieron que comparezca ante el Congreso antes del 17 de agosto para que aclare su participación en lo que consideran un “episodio vergonzoso de la historia estadounidense”.
La residencia de Trump en Florida fue registrada el lunes por agentes del FBI en una operación del Departamento de Justicia de la que la Casa Blanca se ha desentendido y que los republicanos han calificado de persecución política.
El FBI buscaba documentos clasificados que Trump se habría llevado ilegalmente al dejar la presidencia, una sustracción que fue denunciada en febrero pasado por la Administración de Archivos Nacionales, organismo encargado de resguardar esa documentación.
Además de que comparezca, los republicanos solicitaron a Steidel que informe de la posible existencia de llamadas, mensajes y correos de personal de los Archivos Nacionales con miembros del FBI y del Departamento de Justicia, así como toda la documentación sobre el caso por el que se investiga a Trump y cualquier denuncia presentada ante los tribunales.
En su misiva, los republicanos opinaron que el Gobierno del demócrata Joe Biden está “usando al FBI como un arma contra sus rivales políticos” e instaron a los Archivos Nacionales a aclarar si tienen alguna relación con la redada.
Trump se quejó este miércoles de que los agentes no permitieron a nadie, ni siquiera a sus abogados, acercarse a las estancias en las que entraron durante su redada en Mar-a-Lago -nombre oficial de la residencia del exmandatario en Florida-, y sugirió que el FBI pudo colocar pruebas falsas durante su registro.
La portavoz de la Casa Blanca, Karine Jean-Pierre, aseguró que el registro forma parte de una investigación independiente del Departamento de Justicia y que Biden no estaba avisado de la redada, de la que se enteró por la prensa.
Trump tiene abiertos varios frentes legales, incluido un caso civil sobre las prácticas empresariales de su compañía por el que hoy compareció en Nueva York, donde optó por guardar silencio y no responder a las preguntas de los fiscales.