San Juan, 11 ene (EFE).- El designado secretario de Salud de Puerto Rico, Victor Ramos, descartó este sábado que se haya reportado algún caso de gripe aviar en la isla, luego de que 60 gallinas ponedoras murieran por la enfermedad en una finca en la isla-municipio de Culebra.
“Confirmamos que, hasta el momento, no se ha detectado ningún caso de gripe aviar en personas en Puerto Rico”, aseguró Ramos en un comunicado de prensa.
“Los resultados de pruebas moleculares realizadas hasta ahora han sido negativos en personas que están bajo vigilancia. El Departamento de Salud reitera su compromiso con la transparencia en todo momento y recuerda que somos la única fuente oficial de información”, abundó.
A pesar de que se han reportado estos decesos, no se han registrado casos de infección en humanos, confirmó el viernes la agencia sanitaria.
Las 60 gallinas murieron paulatinamente en la finca desde el pasado diciembre y la prueba realizada a una de ellas dio positivo.
Salud aseguró que, hasta el momento, “la situación relacionada con la detección de la influenza aviar H5N1 en gallinas, en la isla municipio de Culebra está bajo control y en vigilancia”.
Las autoridades identificaron ocho personas que tuvieron contacto con los animales, entre ellos empleados de la finca y familiares del propietario del lugar.
También elevaron el nivel de alerta de 4, que es observación, a 3, de monitoreo de las personas que tuvieron contacto con las aves.
La situación ha provocado que se sacrificara el resto de las aves que quedaban con vida y también se dispuso de la producción de huevos.
Por su parte, la Organización Mundial de Sanidad Animal (OMSA) avisó de que la amenaza actual de la gripe aviar de alta patogenicidad (IAAP, en inglés) exige una atención mundial “urgente”, porque trasciende sus orígenes aviares para afectar, cada vez con mayor frecuencia, a mamíferos domésticos y salvajes.
Más de una treintena de especies ya ha sido infectada por esta enfermedad y se prevé que vaya en aumento, lo cual supone una “amenaza para la fauna salvaje, los animales domésticos y la salud pública”, en palabras de la OMSA.
La situación ha llevado a esta organización a pedir a sus 183 países miembros que aumenten la vigilancia para detección precoz en ejemplares susceptibles, efectúen diagnósticos en las no aviares y notifiquen los casos en todas las especies animales.
Además, aconseja aplicar medidas preventivas tempranas para romper el ciclo de transmisión y proteger a las personas en estrecho contacto o que manipulen ganado enfermo y sus productos; y reclama a los países que eviten aplicar restricciones comerciales “injustificadas”.