Miami, 30 jun (EFE).- El ayuntamiento de Miami Beach (Florida) presentó este jueves la primera de las icónicas casetas de salvavidas de su famosa playa que está dedicada a la comunidad LGTBQ+ y tiene pintada la bandera del arcoíris en su paredes.
La presentación se hizo en el último día de junio para marcar el cierre del Mes del Orgullo LGBTQ+.
“Estoy orgulloso de vivir en una ciudad como Miami Beach que celebra la diversidad en todas sus bellas formas y da la bienvenida a todos a sus costas”, afirmó en un comunicado el comisionado (concejal) municipal Alex Fernández.
Fernández fue quien puso en marcha la recomendación del Comité Asesor LGBTQ+ de la ciudad para transformar la caseta de los salvavidas situada a la altura de calle 12, una zona frecuentada por esa comunidad.
“El nuevo puesto de salvavidas arcoíris en nuestra popular playa gay se convertirá rápidamente en un ícono de Instagram que retratará al mundo que somos un destino seguro y acogedor para toda esta comunidad”, agregó.
La celebración anual del Orgullo de Miami Beach se lleva a cabo todos los años en abril, pero en EE.UU. el mes del orgullo es junio, que es cuando se conmemora el Levantamiento de Stonewall de 1969 en Manhattan, que, según la Biblioteca del Congreso, fue un punto de inflexión para la liberación del movimiento gay.
Frente al Ayuntamiento de Miami Beach ondea durante todo el año la bandera del Orgullo del Progreso junto con la bandera estadounidense para demostrar su compromiso con la comunidad LGBTQ+.
“No hay nada más icónico en Miami Beach que nuestras torres de salvavidas. Esta torre Pride (orgullo) refleja el compromiso de nuestra ciudad de apoyar la diversidad”, dijo otro comisionado de la ciudad, David Richardson.
“Estoy muy orgulloso de nuestra ciudad: elegimos el amor sobre el miedo”, apuntó Edward Martí Kring, presidente del Comité Asesor LGBTQIA+ de Miami Beach.
Los puestos de los socorristas de la playa, una imagen icónica de Miami Beach con sus vibrantes colores y formas inspiradas en el estilo Art Decó que caracteriza el centro histórico de la ciudad, son obra del arquitecto William Lane, al que el Ayuntamiento le encargó diseñarlos después de que el huracán Andrew destruyera los anteriores en 1992.