Charlotte, NC — La tensión marcó la reunión del martes 12 de agosto del Consejo Escolar de Charlotte-Mecklenburg (CMS) cuando decenas de miembros de la comunidad expresaron su fuerte oposición a las políticas del distrito respecto a la presencia de agentes del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) en los planteles, a pocos días del inicio del nuevo año escolar.
El encuentro, cargado de emociones, se tornó tan acalorado que personal de seguridad tuvo que escoltar a una mujer fuera de la sala durante el período de comentarios públicos.
REACCIONES
Cerca de una docena de oradores manifestaron preocupación por la seguridad estudiantil y la cooperación del distrito con las autoridades federales de inmigración.
“Rechacen órdenes injustas, prohíban a ICE en las escuelas”, exigió una defensora comunitaria, mientras otra acusó: “La sangre de los niños está en sus manos”.
Las críticas se centran en la actualización de protocolos internos que permiten a los agentes de ICE ingresar a áreas públicas de los planteles —como vestíbulos, salas de espera y estacionamientos— sin autorización previa de directivos.
“Las escuelas deben ser un lugar seguro para todos los estudiantes, incluidos los hijos de inmigrantes”, dijo una residente de Charlotte. Otros padres y activistas calificaron a las escuelas como espacios santuario libres de acciones de inmigración.
MIEMBROS DE JUNTA
El vicepresidente del Consejo, Dee Rankin, intentó tranquilizar a la comunidad asegurando que existen salvaguardas y que ICE debe retirarse si no presenta una orden judicial o citación.
Liz Monterrey Duvall, miembro de la Junta Escolar, subrayó que las políticas responden a requisitos federales y estatales, no a decisiones locales.
Mientras el distrito se prepara para el regreso a clases y la llegada de su nuevo jefe de seguridad, Jonathan Thomas, excomandante de investigaciones especiales de la Policía de Charlotte-Mecklenburg, continúa la capacitación de directores y líderes escolares sobre cómo actuar si ICE se presenta en las escuelas.


