Ciudad de México, 19 oct (EFE).- La Oficina en México del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ONU-DH) llamó este jueves al Gobierno mexicano a profundizar el desmantelamiento de las estructuras que cobijan la impunidad en el país.
La petición de la ONU-DH se da tras la renuncia este jueves de Alejandro Encinas, subsecretario de Derechos Humanos, Población y Migración del Gobierno mexicano y quien lideró las polémicas investigaciones sobre desaparecidos, Fuerzas Armadas y, en específico, sobre el caso de los estudiantes desaparecidos Ayotzinapa en 2014.
“Ante el anuncio de la designación de Félix Arturo Medina Padilla como nuevo titular de la Subsecretaría de Derechos Humanos, Población y Migración, la ONU-DH anima respetuosamente a profundizar el desmantelamiento de las estructuras que aún cobijan la impunidad en México”, indicó el organismo multilateral en boletín.
Además, pidió fortalecer las autoridades civiles, la rendición de cuentas, el combate a la desaparición de personas sin regresión alguna y la protección de las personas en situación en vulnerabilidad.
También la ampliación del espacio cívico, mediante trabajo conjunto entre víctimas, organizaciones civiles y organismos internacionales de derechos humanos.
“La ONU-DH expresa su compromiso para seguir trabajando con el Estado mexicano en su conjunto en favor de la promoción y protección de los derechos humanos de todas las personas”, manifestó.
El organismo aprovechó para reconocer el trabajo de Encinas, tras su paso por la Secretaría de Gobernación, “por la apertura y disposición para trabajar de manera colaborativa, sobre la base del diálogo y el respeto mutuo, en favor de la promoción y protección de los derechos humanos reconocidos internacionalmente”.
En este sentido, subrayó que Encinas, que ahora se sumará al equipo de la aspirante presidencial por el oficialismo en México para las elecciones de 2024, Claudia Sheinbaum, impulsó diversos proyectos benéficos.
“En medio de dificultades de distinta índole, se impulsaron proyectos y sentaron algunas bases que, lejos de revertirse, merecen fortalecerse, profundizarse y consolidarse en beneficio de la verdad, la justicia”, enfatizó el organismo.
Encinas era el rostro más visible de la política de derechos humanos desde el inicio del Gobierno de López Obrador, en diciembre de 2018, y el más cercano a las organizaciones ciudadanas que trabajan en la materia.
Pero el funcionario afrontó controversias recientes por la defensa que ha hecho López Obrador de las Fuerzas Armadas y por el intento del mandatario de cambiar el censo nacional de desaparecidos, que ahora contabiliza de forma oficial más de 110.000.
Una de las mayores polémicas fue la renuncia en agosto pasado de Karla Quintana, titular de la Comisión Nacional de Búsqueda (CNB) de personas, en medio de presuntas presiones del Gobierno de López Obrador para modificar el registro de desaparecidos y bajar las cifras.
Mientras que en septiembre, Encinas presentó el segundo informe de la Comisión de la Verdad de Ayotzinapa en medio de reclamos de los padres de los 43 estudiantes desaparecidos en 2014, quienes acusan al Gobierno de proteger a las Fuerzas Armadas, implicadas en el caso.