Redacción Deportes, 17 may (EFE).- El extoletero dominicano Nelson Cruz tendrá una nueva misión en su carrera en el béisbol profesional, luego de que este viernes se anunciara su designación como Asesor Especial para Operaciones de Béisbol de las Grandes Ligas.
En este nuevo rol, Cruz se enfocará en temas de América Latina y en el fomento de lazos entre los jugadores y la MLB.
En sus 19 años de carrera en las Grandes Ligas, Cruz demostró una gran capacidad para desarrollar relaciones de amistad con sus compañeros, rivales y con la comunidad de los clubes para los que jugó, sin olvidarse de su labor caritativa en la República Dominicana, como lo reconoce el comisionado de las Grandes Ligas, Rob Manfred.
“Nelson Cruz es una voz respetada en el juego, cuyo servicio sobresaliente a los jóvenes y los necesitados en la República Dominicana le ameritó el Premio Roberto Clemente. Es un apasionado a la hora de hacer crecer el juego y mejorar los temas para los jugadores y para nuestro deporte en general”, expresó Manfred, al referirse a su nuevo asesor, en un comunicado dado a conocer este viernes.
Por su parte, Cruz entiende que su experiencia, desde su recorrido por los circuitos minoritarios, con su llegada al béisbol profesional, su labor social y como mentor de jóvenes jugadores, estará a disposición de este nuevo reto que tiene en sus manos.
“Estoy extremadamente contento de unirme a Major League Baseball. Estoy emocionado de trabajar con la Oficina del Comisionado y con la oportunidad de trabajar con jugadores jóvenes al compartir lo que he aprendido desde que firmé en 1998”, afirmó el siete veces convocado al Juego de Estrellas.
Cruz, quien empalmó 464 jonrones en su paso por las Grandes Ligas, ganó también el premio Muhammad Alí, que reconoce el liderazgo al servicio de su comunidad a través del deporte.
El respeto hacia Cruz no solo ha sido expresado por jugadores dominicanos, sino de otras nacionalidades, como es el caso del venezolano Luis Arráez, quien lo considera como su hermano y como un gran contribuyente de sus logros en las Grandes Ligas.
“Es como mi hermano. Todo lo que hago aquí es gracias a él, porque me ha ayudado mucho. Me apoya mucho y me enseñó la importancia de tener una rutina clara”, expresó el dos veces campeón de bateo, quien fue compañero de Cruz en los Mellizos de Minnesota.
Al firmar para el profesionalismo, generalmente entre las edades de 17 a los 19 años, y avanzar por los distintos niveles de la MLB, los jugadores latinos suelen enfrentar grandes cambios en su estatus de vida, a nivel cultural y de mayores responsabilidades, que pueden afectar sus carreras, por lo que Cruz, quien enfrentó esas mismas condiciones y logró ser exitoso, entiende que puede brindar las respuestas que los mantengan en la dirección correcta.