Toronto (Canadá), 29 jul (EFE).- Los equipos de emergencia trabajan este lunes para controlar el incendio que la semana pasada arrasó gran parte de la localidad de Jasper, en las Montañas Rocosas de Canadá, y evitar que las llamas causen más daño.
Al menos dos incendios fuera de control siguen activos en el Parque Nacional de Jasper, una de las principales áreas naturales de Canadá y que el año pasado atrajo unos 2,5 millones de visitantes. Las llamas han consumido ya unas 32.000 hectáreas, la mayor pérdida de vegetación que el parque ha sufrido en más de un siglo.
Uno de esos incendios obligó el martes a la evacuación de los 10.000 residentes de la localidad de Jasper, que da nombre al parque nacional, y unos 25.000 turistas. El jueves las llamas consumieron alrededor de un tercio de la localidad.
El ministro de Medio Ambiente de Canadá, Steven Guilbeault, confirmó este lunes en una rueda de prensa que todos los incendios estructurales en la localidad de Jasper fueron extinguidos y que los equipos de emergencia están trabajando para restaurar la energía eléctrica a la localidad.
Guilbeault también declaró que se está aprovechando la mejora de las condiciones meteorológicas para ampliar el cortafuegos alrededor de Jasper a tres kilómetros de la población.
Los incendios en el Parque Nacional de Jasper también han afectado al tráfico ferroviario que no se espera que vuelva a la normalidad hasta dentro de al menos 15 días.
Las autoridades canadienses describieron este lunes el fuego que destruyó grandes áreas de Jasper como un infierno con llamas que llegaban hasta 300 metros de altura, 100 metros por encima de la copa de los árboles, “que lanzaba piñas en llamas a una distancia de un kilómetro y que creó su propio sistema meteorológico”.
Ron Holman, presidente de Parks Canada, el organismo federal a cargo de Jasper, dijo que “no había nada que ningún humano o ninguna pieza de equipo podría haber hecho para enfrentarse y parar ese muro de fuego”.
Durante el fin de semana, la bajada de las temperaturas ayudaron a los equipos de emergencia a luchar contra las llamas, pero los meteorólogos advirtieron que a final de esta semana se espera la vuelta de elevadas temperaturas que facilitarán el avance de las llamas.
En un comunicado dado a conocer a última hora del domingo, Parks Canada señaló que los bomberos han podido reforzar las defensas para ralentizar la progresión de las llamas en caso de que el incendio vuelva a amenazar la localidad.
Las autoridades de la provincia de Alberta, donde se sitúa Jasper, agradecieron a los bomberos que han llegado en los últimos días de varios países, entre ellos México, para ayudar a combatir los 129 incendios forestales que este lunes están activos en el territorio.
Aunque la situación este año no es tan crítica como en 2023, cuando Canadá sufrió su peor temporada de incendios forestales con la destrucción de 17 millones de hectáreas de bosque y vegetación (170.000 kilómetros cuadrados), el país se enfrenta este lunes a 852 incendios activos.
La situación es especialmente grave en el oeste del país (en las provincias de Columbia Británica y Alberta y en el territorio de Yukon), donde las elevadas temperaturas y las escasas precipitaciones están favoreciendo la aparición de centenares de fuegos.
Solo en Columbia Británica este lunes están activos 320 incendios forestales. En Yukon son 88 y en Alberta 129.
En lo que va de año, las llamas han consumido 2,6 millones de hectáreas en todo Canadá.