Los Ángeles, 27 jun (EFE).- Los Ángeles (California) se ha posicionado como uno de los condados de Estados Unidos que más apoyan a los inmigrantes al realizar inversiones “históricas”, aunque aún necesita aplicar más medidas para combatir la inequidad lingüística y digital, reveló hoy martes un estudio de la Universidad del Sur de California (USC).
El informe anual del Estado de los Inmigrantes en Los Ángeles 2023 (SOILA) encontró que el condado asignó recursos para afrontar directamente las necesidades de los inmigrantes residentes de los fondos recibidos del Acta del Plan de Rescate Estadounidense (ARPA) del presidente Joe Biden.
Aunque no se reveló una cifra exacta de la inversión, el estudio destaca también aportes de fondos locales y estatales, y donaciones privadas “sin precedentes”.
El profesor de USC Manuel Pastor, uno de los autores del estudio, dijo a EFE que en este “momento histórico” es crucial destacar las políticas públicas favorables a los inmigrantes.
“Estamos viendo una pérdida de apoyo hacia los inmigrantes en el resto del país, por ejemplo en Florida y Texas, por lo que es muy importante resaltar que California y Los Ángeles ha tomado una ruta diferente”, enfatizó el investigador.
El estudio encontró que el 34 % (3,5 millones) de los habitantes del condado de Los Ángeles son inmigrantes y más de 800.000 son indocumentados.
El 20% de las familias de Los Ángeles tienen al menos un integrante indocumentado.
Los inmigrantes también representan el 40 % de los trabajadores de Los Ángeles.
“Para Los Ángeles es muy importante proteger a estas familias porque contribuyen muchísimo a la economía del condado; son esenciales para nuestra fuerza laboral”, indicó Pastor.
Los inmigrantes contribuyeron con 10.700 millones de dólares en impuestos estatales y locales, 20.800 millones en impuestos federales y 83.800 millones en poder adquisitivo en 2019, encontró el estudio.
No obstante, los inmigrantes, como los demás habitantes de Los Ángeles, enfrentan una crisis de vivienda asequible y de salarios bajos, destacó Pastor.
Por ejemplo, el 60 % de los inmigrantes que son inquilinos dijeron estar agobiados por el pago de sus alquileres y destinan más del 30 % de su ingreso a pagar la vivienda.
“En este reporte queremos destacar que no se puede desconectar a los inmigrantes de estos problemas”, expuso el académico.
El reporte también encontró que los inmigrantes han experimentado barreras de idioma, y el 28 % de todos los hogares de inmigrantes están lingüísticamente aislados (solo hablan su lengua nativa).
El problema afecta más a los indocumentados, que tienen la más alta probabilidad entre los inmigrantes (37 %) de estar lingüísticamente aislados en comparación con los residentes legales (30 %) y los hogares de ciudadanos naturalizados (24 %).
Pastor advirtió que es necesario que los inmigrantes tengan acceso a servicios adecuados de traducción e interpretación para participar cívicamente y acceder a información y servicios vitales.
Asimismo, señaló la necesidad de trabajar en las brechas digitales. El estudio encontró que la mitad de los indocumentados en Los Ángeles carecen de internet de alta velocidad o una computadora en casa.
La investigación también halló que, aunque los esfuerzos por ayudar a los inmigrantes y sus comunidades a prosperar son cada vez más amplios e inclusivos, “como se evidencia en las conversaciones presupuestarias” se necesita incluir a grupos desatendidos como los inmigrantes indígenas, a los nuevos refugiados y a los solicitantes de asilo recién llegados.
El informe fue presentado este martes en la Cumbre de Inmigración, que por dos días realiza la Fundación Comunitaria de California y reúne líderes sociales, funcionarios elegidos y representantes de la comunidad inmigrante de Los Ángeles.
Rosie Arroyo, de la Fundación Comunitaria de California, explicó a EFE que la convocatoria se ha dedicado a “explorar” caminos para mejorar la vida de los inmigrantes y a construir un diálogo inclusivo.
“En los Ángeles valoramos las contribuciones de los inmigrantes. Por más de dos décadas hemos empujado medidas para fortalecer a esta comunidad y hemos visto los frutos”, agregó.
Como parte de los esfuerzos el condado estableció una oficina dedicada exclusivamente a temas de los inmigrantes y el programa Represent LA, que brinda representación legal a los inmigrantes que enfrentan deportación y a las personas vulnerables que buscan ayuda migratoria afirmativa.
Arroyo destacó que la mayoría de los inmigrantes en Los Ángeles llevan más de 10 años viviendo en la comunidad, por lo que es necesario seguir buscando canales para integrarlos.
La investigación presentada hoy es un esfuerzo del Instituto de Investigación de Equidad de la USC en colaboración con la Fundación Comunitaria de California y el Consejo de Inclusión de Inmigrantes.