Ciudad de México, 20 jun (EFE).- El presidente mexicano, Andrés Manuel López Obrador, prometió que las Fuerzas Armadas responderán a la emergencia provocada por el primer ciclón de la temporada del Atlántico, la tormenta Alberto, que tocó tierra este jueves en el noreste de México y ha dejado al menos tres muertos.
“Es el primer ciclón o fenómeno de lluvia intensa en el Golfo (de México), ha llovido bastante en el sureste y va a entrar, está entrando, por la costa de Tamaulipas, y ya se está actuando, está el Ejército, está la Marina, está la Guardia Nacional”, declaró en su conferencia matutina.
Tras tocar tierra a las 4:30 hora local (10:30 GMT) en Ciudad Madero, en el fronterizo estado de Tamaulipas, el fenómeno se desplaza sobre Nuevo León y Coahuila, ambos en el noreste, según el Servicio Meteorológico Nacional (SMN).
El ciclón ya causó el deceso de tres menores de edad en Nuevo León, donde un adolescente de 15 años se ahogó ante la crecida del río La Silla en Monterrey y dos niños de 12 años murieron electrocutados en el municipio de Allende, lo que López Obrador calificó como “desgracias” ocurridas de “manera indirecta”.
El gobernante mexicano aseveró que “se está trabajando”, que su gabinete de seguridad abordó el tema en su reunión diaria de este jueves y que desde el miércoles “están dándole seguimiento”.
“Se está buscando proteger a la población que vive a la orilla de los ríos, de arroyos, de las zonas bajas, por lo que se conoce como crecientes o incremento en los cauces, básicamente es agua, mucha agua, no tenemos más que ese reporte, inundaciones como tal”, señaló López Obrador.
El ciclón presenta vientos sostenidos de 75 kilómetros por hora, rachas de hasta 95 kilómetros por hora y un desplazamiento hacia el oeste a 20 kilómetros por hora, según el SMN.
Los estados más afectados son Coahuila, Nuevo León y Tamaulipas, en la frontera noreste de México con Estados Unidos, además de San Luis Potosí, donde hay lluvias “puntuales torrenciales”, de 150 a 250 milímetros, indicó el pronóstico.
Ante el fenómeno, el Gobierno de Nuevo León declaró “alerta máxima” porque el ciclón dejaría inundaciones en Monterrey, la segunda mayor ciudad del país, donde suspendió el transporte público, clases y labores no esenciales.