Ciudad de México, 10 abr (EFE).- El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, celebró este miércoles la postura la Organización de Estados Americanos (OEA), que condenó el asalto de la policía ecuatoriana en la embajada mexicana en Quito, y la consideró algo “atípico, pero consecuente”.
“Lo que acabamos de ver de la OEA es algo atípico, pero consecuente”, señaló el mandatario durante su conferencia de prensa matutina.
El gobernante mexicano se refirió a la resolución de este miércoles en la OEA, que condena “enérgicamente” la violenta irrupción de la policía ecuatoriana en la embajada mexicana en Quito ocurrida el pasado viernes y que derivó en la ruptura de relaciones diplomáticas entre ambos países.
Cuestionado de forma directa sobre su opinión acerca de la resolución, en la que solo Ecuador votó en contra y El Salvador se abstuvo, López Obrador aseguró que estaba “muy bien”.
Momentos antes, el mandatario había reconocido la solidaridad internacional sobre lo ocurrido e insistió en que constituyó una violación de la soberanía de México y del derecho internacional.
“Ayer mismo la OEA, aún con todo lo que significa la OEA, todos los gobiernos representados, incluso el secretario Almagro, Luis Almagro, que ha tenido una actitud muy conservadora y antidemocrática, condenó el hecho porque, la verdad, es injustificable”, reconoció.
Y resaltó que hasta el Gobierno de Argentina, liderado por Javier Milei, expresó su rechazó a la toma de la embajada mexicana en Quito.
Por otro lado, criticó la postura del vicecanciller de Ecuador, Alejandro Dávalos, quien en la reunión de la OEA, según López Obrador, pidió que se modifique el derecho internacional “para que no se dé asilo y no se protejan las embajadas”.
Los hechos ocurrieron la noche del viernes, cuando, por orden del presidente de Ecuador, Daniel Noboa, la Policía del país irrumpió en la embajada mexicana para arrestar a Jorge Glas, exvicepresidente (2013-2017) durante el Gobierno de Rafael Correa, procesado por corrupción y que había pedido asilo político a México.
Las cámaras de seguridad del interior del recinto muestran cómo los policías apuntaron con una pistola a Roberto Canseco, encargado de la misión diplomática, mientras se llevaban a Glas a la fuerza.
La mayoría de los gobiernos latinoamericanos y varios europeos condenaron los hechos porque suponen una vulneración de la Convención de Viena, que estipula que las embajadas son inviolables.
Por su parte, Ecuador acusa a México de haber violado los tratados internacionales sobre el derecho al asilo al haber dado refugio a una persona procesada por corrupción.
Este miércoles, López Obrador anunció que su Gobierno presentará el jueves su denuncia contra Ecuador en la Corte Internacional de Justicia (CIJ).