Chicago (EE.UU.), 2 jun (EFE).- Las Connecticut Sun mantuvieron el rodillo esta semana en la WNBA y sumaron su octava victoria en igual cantidad de partidos, mientras que Caitlin Clark, la primera elección absoluta en el más reciente draft, sigue sufriendo, no solo por las derrotas de sus Indiana Fever sino por el juego muy físico de sus rivales.
Las polémicas se originaron el sábado en Indiana, cuando las Fever ganaron por 71-70 a las Chicago Sky en la que fue la segunda victoria de su trabajada temporada.
En un saque, y con el balón todavía sin estar en juego, Chennedy Carter dio un fuerte golpe con el hombro a Clark, quien acabó tendida en el suelo.
Clark no reaccionó ante el gesto de su rival y siguió compitiendo. Los árbitros pitaron una falta ‘normal’, antes de que el balón estuviera en juego, pero este domingo corrigieron esa decisión y ordenaron una falta flagrante de tipo 1.
Clark consideró que es un “deporte físico” y que la única manera de encararlo es seguir compitiendo, afirmó en la rueda de prensa posterior al partido.
No es la primera vez que Clark, un prodigio ofensivo llamado a marcar un antes y un después en el baloncesto femenino, convive con este tipo de trato en la pista.
Entre los jugadores que reaccionaron estuvo Draymond Green, de los Golden State Warriors, quien consideró que las Fever deberían tomar medidas para proteger a Clark.
A nivel deportivo, Clark volvió a competir este domingo y no pasó de los tres puntos en la derrota 104-68 sufrida en el campo de las New York Liberty.
Las Fever tienen un modesto balance de dos victorias y nueve derrotas este curso.
Las líderes del Este son las Sun, que ganaron sus ocho partidos disputados. Este domingo triunfaron por 69-50 en el campo de las Atlanta Dream.
En el Oeste mandan las Minnesota Lynx (6-2), mientras que Las Vegas Aces (4-2) son segundas tras perder esta semana frente a las Dream.