Washington, 14 ago (EFE).- El Índice de Precios al Consumo (IPC) de Estados Unidos bajó una décima en julio hasta el 2,9 % respecto al dato de junio, todavía por encima del objetivo del 2 % de la Reserva Federal pese a los altos tipos de interés.
El de julio es el dato de inflación más bajo desde marzo de 2021, por lo que crecen las expectativas de que la Reserva Federal (Fed) decida empezar a recortar los tipos de interés en su reunión de septiembre con una bajada de un cuarto de punto.
La Oficina de Estadísticas Laborales (BLS, en inglés) de Estados Unidos informó este miércoles de que los precios al consumo aumentaron dos décimas con respecto a junio.
La inflación subyacente, un dato clave que excluye los volátiles precios de alimentos y combustibles, también bajó una décima interanual hasta el 3,2 %, y en términos mensuales subió dos décimas.
El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, celebró el dato aunque lamentó que “los precios siguen siendo demasiado altos: las grandes corporaciones están acumulando ganancias récord y no están haciendo lo suficiente para bajar los precios”.
“El dato de hoy muestra que seguimos avanzando en la lucha contra la inflación y reduciendo los costos para los hogares estadounidenses”, dijo Biden, que aseguró que su Gobierno está “logrando un progreso real”.
El BLS señaló que el índice de vivienda aumentó en julio (el 0,4 % mensual), lo que contribuyó a más del 90 % del incremento mensual de los precios de todos los artículos. La vivienda acumula una alza interanual del 5,1 %.
El precio de la energía se mantuvo estable tras bajadas en los dos anteriores periodos y acumula una subida del 1,1 % en los últimos 12 meses, mientras que el de los alimentos subió dos décimas en julio, con una aumento interanual del 2,2 %.
El índice de la gasolina también se mantuvo estable en julio y acumula una bajada del 2,2 % en el último año.
Con esta, la inflación acumula cuatro bajadas seguidas desde el dato de marzo, que fue del 3,5 %.
La Fed mantiene los tipos de interés desde julio de 2023 en una horquilla de entre el 5,25 % y el 5,5 %, su máximo nivel desde 2001, tras once subidas iniciadas en marzo de 2022.
Todos los ojos están puestos ahora en la reunión mensual que la institución celebrará entre el 17 y el 18 de septiembre, en la que se espera se pueda ver una primera bajada de tipos.
El presidente de la Fed, Jerome Powell, ha insistido en que quiere ver una bajada sostenida de la inflación y que el aumento de precios se acomode alrededor del 2 % para poder tomar esa decisión.