Washington, 21 nov (EFE).- La congresista republicana Marjorie Taylor Greene, una de las figuras más mediáticas de la derecha estadounidense y antigua aliada del presidente, Donald Trump, anunció este viernes que dejará su escaño en la Cámara de Representantes a partir de enero de 2026.
La legisladora por Georgia comunicó su decisión en un video de más de diez minutos difundido en redes sociales.
Taylor Green afirmó que nunca logró encajar en Washington y sostuvo que ha sido “rechazada” por la élite política desde su llegada al Congreso.
Su renuncia llega tras meses de tensiones públicas con Trump, a quien criticó recientemente por su manejo de los documentos relacionados con Jeffrey Epstein, así como por posiciones en política exterior y en materia sanitaria.
El expresidente respondió tachándola de “traidora” y “excéntrica”, y advirtió que respaldaría a un rival interno si Greene buscaba la reelección en 2026.
Ese distanciamiento marcó una ruptura significativa entre Trump y una de las voces que más fervientemente defendió el movimiento Make America Great Again (MAGA), durante su primer mandato.
La congresista, que se hizo conocida por su estilo combativo y su protagonismo en la bancada republicana más radical, confirmó que su último día en el cargo será el 5 de enero de 2026.
La salida de Greene subraya la presión que enfrentan los legisladores republicanos que se distancian de Trump, especialmente entre su base más fiel.
Con su renuncia, la política de Georgia se suma a otros representantes que abandonaron el Congreso tras chocar con el líder republicano y su influencia dentro del partido sigue siendo motivo de debate.


