Ciudad de México, 11 dic (EFE).- La noche de rábanos de Oaxaca cumplirá 126 años reforzando la tradición de construir obras de arte a partir de rábanos y presentarlos el día 23 de diciembre ante los cientos de turistas y curiosos que se dan cita en el zócalo de la capital del estado con el mismo nombre en el sur de México.
Durante una conferencia de prensa en la Ciudad de México, Ángel Norberto Osorio, secretario de Fomento Turístico, explicó los pormenores del certamen, que ha ido creciendo desde su nacimiento en 1897, cuando llamó la atención que los comerciantes de una feria de alimentos para las celebraciones decembrinas hacían figuras con rábanos para llamar la atención de los posibles clientes.
“Los hortelanos adornaban sus puestos con vegetales, con rábanos. Empezó a llamar la atención y se fue haciendo tan popular y exitoso que el 15 diciembre de 1897 Francisco Vasconcelos, presidente municipal de Oaxaca en ese momento hizo posible que se concretara este certamen”, explicó Osorio.
A día de hoy, la fiesta ha crecido en dimensiones, atrayendo a turismo local e internacional con técnicas y figuras más sofisticadas. Aunque las zonas donde había laboríos fueron consumidas por la mancha urbana, se hace una siembra de rábanos en otra zona en septiembre, octubre y noviembre para que haya rábanos de diferentes tamaños para el certamen.
De las personas que se presentan, hay 100 lugares para el día 23. El 19 se les entregan los rábanos y en tres días tienen que tener sus obras listas.
Además de las categorías tradicional y libre de rábano, hay otra de flor inmortal y la última de totomoxtle (hoja de maíz). También hay tres categorías de figuras y obras hechas con rábano para menores de edad.
La inversión por parte del ayuntamiento es de 1,1 millones de pesos (63.261 dólares) y se estima que, cada año, asisten entre 10.000 y 12.000 personas.