Miami, 14 oct (EFE).- La Fiscalía estatal pidió este viernes que se investigue si un miembro del jurado en el caso de Nikolas Cruz, el autor del tiroteo en 2018 en una secundaria del sur de Florida (EE.UU.), fue efectivamente amenazado por otro integrante de panel.
La oficina de la Fiscalía solicitó que la Policía entreviste a una integrante del jurado que durante las deliberaciones que culminaron el jueves, con la recomendación de imponer Cruz cadena perpetua, “recibió lo que percibió como una amenaza de un miembro del jurado mientras estaba en la sala del jurado”, según un escrito ingresado en la corte la noche del jueves.
En una audiencia celebrada hoy, la fiscal estatal Carolyn McCann, precisó a la magistrada Elizabeth Scherer que con la moción no pretenden invalidar el veredicto del jurado, sino solo reportar la presunta amenaza por razones de seguridad.
De acuerdo con la moción, la mujer llamó a la oficina de la Fiscalía la tarde del jueves y pidió hablar con el fiscal que lideró la acusación, Michael Satz, para comunicar “esta grave denuncia” que puede constituir la comisión de “un delito”, de acuerdo a la Fiscalía.
Como dio a conocer en la audiencia de hoy la jueza Scherer, la denuncia ha sido trasladada a la Oficina del Alguacil del Condado Broward, al norte de Miami, quien citará a la denunciante.
La magistrada Scherer manifestó por su parte que poco después de la lectura del veredicto un miembro del jurado quiso hablar con ella, pero le pareció inapropiado y no accedió a la petición.
El jueves, los doce miembros del jurado no lograron el consenso necesario con miras a recomendar la pena de muerte para Cruz, quien un año atrás se declaró culpable de todos los cargos que se le imputaban por la matanza que perpetró el 14 de febrero de 2018 en la escuela secundaria Marjory Stoneman Douglas, en Parkland.
El veredicto del jurado desató la indignación y rabia de los familiares de las víctimas, que en su gran mayoría pedían la pena capital para el joven de 24 años, y quien ahora pasará el resto de su vida en prisión, sin posibilidad de libertad condicional.
“Si (este caso) no es razón para la pena de muerte, qué lo es”, se preguntó en declaraciones a EFE Manuel Oliver, padre del adolescente Joaquín Oliver, uno de los 17 fallecidos en el tiroteo que desató Cruz y en el que otras 17 personas resultaron heridas.
El joven exalumno de la escuela enfrentaba dos posibles sentencias, cadena perpetua sin posibilidad de libertad condicional o la pena de muerte.
Bajo las leyes de Florida, en el último caso se requería la unanimidad por parte de los doce miembros del jurado en al menos uno de los 17 cargos por homicidio que afrontaba.
Como declaró a medios de Miami el presidente del jurado, Benjamin Thomas, si bien la mayoría se inclinaba por la pena de muerte hubieron tres miembros de este panel que al final se decanaron por la cadena perpetua bajo la premisa de que Cruz sufre problemas mentales.
“Todavía hay mucha decepción por el veredicto de ayer en el caso del tiroteo en la escuela de Parkland para negar la imposición de la pena de muerte para alguien que masacró a tanta gente a sangre fría y truncó vidas jóvenes, vibrantes y llenas de potencial”, dijo este viernes el gobernador estatal, Ron DeSantis, en una rueda de prensa.
Agregó que estudiará posibles reformas legales para casos como este.
El día de los hechos, Cruz ingresó con un rifle de asalto al edificio de primer año de la secundaria Marjory Stoneman Douglas y abrió fuego de forma indiscriminada, para luego huir camuflado entre la multitud hasta que posteriormente fue detenido por la Policía local, a la que confesó ser el autor de la masacre.
La matanza de Parkland desató un movimiento a favor del control de armas en EE.UU. protagonizado por algunos alumnos de la misma escuela, que llevaron su reclamo a la capital de EE.UU. y algunas medidas en Florida para prevenir tiroteos masivos y hacer más difícil el acceso a armas bélicas.