Washington, 12 ago (EFE).- Un juez federal en Montana restauró hoy una moratoria sobre el arriendo de tierras públicas para la minería del carbón que había sido impuesta por el ahora expresidente Barack Obama y anulada por su sucesor Donald Trump.
En un fallo de 19 páginas el juez Brian Morris ordenó la reimposición de la moratoria hasta que el Buró de Gestión de Tierras (BLM) complete un análisis exhaustivo del impacto ambiental.
Cuando el Gobierno de Obama (2009-2017) decretó esa medida la secretaria del Interior, Sally Jewell, la describió como temporal y explicó que daría tiempo para una revisión el programa de arriendos que databa de tres décadas atrás.
La revisión, indicó entonces la funcionaria, permitiría evaluar si la ciudadanía recibía un beneficio justo de los cientos de millones de toneladas de carbón, de propiedad del Gobierno, que se extraían y vendían cada año.
El secretario del Interior en el Gobierno de Trump (2017-2021), Ryan Zinke, anuló la moratoria en 2017 como parte de una serie de medidas designadas para incrementar la explotación de combustibles fósiles en Estados Unidos.
En 2019 grupos de indígenas y defensores del ambiente obtuvieron un fallo de tribunales que requería un análisis ambiental antes del levantamiento de la moratoria. Pero el análisis hecho por BLM se consideró inadecuado y los demandantes volvieron a los tribunales en 2020.
El Gobierno del presidente Joe Biden revocó el año pasado la orden de Zinke, pero no restauró la moratoria.
La decisión del juez Morris “es una victoria significativa para nuestro clima y las comunidades en todo el país impactadas por nuestra continuada dependencia de este combustible sucio y peligroso”, dijo Jenny Harbine, abogada del grupo ambientalista Earthjustice.
“Si bien esto restaura la moratoria sobre nuevos arriendos en tierras públicas, el Gobierno de Biden debe ir más allá recortando de manera urgente los arriendos ya existentes que están destruyendo nuestro planeta”, añadió.
“La Tribu ha luchado y se ha sacrificado para proteger nuestros lares para generaciones, y nuestras tierras y aguas son todo para nosotros”, dijo Serena Wetherelt, presidenta de la Tribu Cheyene del Norte.