Nueva York, 16 oct (EFE).- Una juez federal de Estados Unidos ordenó este jueves a los agentes de inmigración de Chicago llevar cámaras corporales, y afirmó estar preocupada por el uso de gas lacrimógeno y otros métodos agresivos contra manifestantes.
La magistrada Sara Ellis emitió la semana pasada una orden judicial en la que prohibía a los miembros del Servicio de Inmigración y Aduanas (ICE) usar la fuerza contra periodistas y manifestantes que no suponen una amenaza.
En una audiencia celebrada hoy en Chicago, Ellis amplió dicha orden para exigir a los agentes federales que lleven cámaras corporales, asegurando estar “profundamente preocupada” por supuestas violaciones a su previo fallo judicial.
“Estoy viendo imágenes y leyendo noticias en los periódicos que me hacen dudar sobre si se está cumpliendo mi orden”, apuntó Ellis en la vista, según reportan medios locales presentes en el tribunal.
En este sentido, hizo referencia al uso de gas lacrimógeno y balas de goma por parte de agentes federales, y dijo estar “sorprendida” por los episodios de violencia que se han desatado entre estos y manifestantes en diversas protestas.
La orden también involucra a los agentes de la Patrulla Fronteriza de EEUU (CBP, en inglés), que según confirmó ayer el Departamento de Policía de Chicago usaron gas lacrimógeno después de que una multitud presuntamente comenzara a lanzar objetos en su contra.
El abogado del Departamento de Seguridad Nacional de EEUU (DHS), Sean Skedzieiewski, insistió en que implementar un programa de cámaras corporales para ICE sería “un desafío” debido al cierre del Gobierno federal, de acuerdo con ABC7.
La orden de la juez, con una duración de 15 días, responde a una demanda de un grupo de periodistas, manifestantes y un religioso que alegaron haber sido lesionados por agentes federales fuera de las instalaciones del ICE en Broadview (Chicago).
El fallo prohibía a los agentes utilizar armas de control de disturbios, como proyectiles y gas lacrimógeno, específicamente contra miembros de la prensa, manifestantes o religiosos que no supongan una amenaza para la seguridad de las fuerzas del orden u otras personas.
Por otra parte, Ellis también anunció que citaría al director de la oficina local de ICE en Chicago para comparecer el próximo lunes, según The New York Times.