Nueva York, 27 may (EFE).- Un juez arremetió este martes contra una orden ejecutiva del presidente Donald Trump que penaliza a WilmerHale, el bufete de abogados donde trabajó el exfiscal especial Robert Mueller, quien lideró la investigación de la supuesta injerencia rusa en su campaña electoral de 2016.
El juez, Richard Leon, de un tribunal federal de Washington DC, emitió un fallo con unas 73 páginas de argumentos que los expertos señalaban como inusual por su tono de indignación, ya que usa signos de admiración y expresiones como “eso no sirve” o “esto es absurdo” para responder al Gobierno de Trump.
A finales de marzo, Trump firmó una orden ejecutiva que rescindía los contratos de WilmerHale con el Gobierno federal, suspendía el acceso de sus empleados a instalaciones de información confidencial y edificios gubernamentales, y prohibía a las agencias federales contratarlos a menos que estuvieran “específicamente autorizados”.
El juez dijo que la orden es “inconstitucional” y la sumó a otras penalizaciones por parte de Trump a bufetes de abogados que han trabajado en casos contra él o asociados a profesionales críticos con él.
Leon mencionó, en ese sentido, “varias órdenes ejecutivas que se han emitido y que retan los derechos fundamentales” que garantizan un poder judicial y unos colegios de abogados independientes en el país.
En este caso, el presidente mencionó como una de las razones para penalizar a la entidad su vinculación con Mueller, a quien asegura que “acogió” después de dirigir “una investigación partidista contra el presidente y otras personas”.
Robert Mueller, que trabajó en este bufete hasta que se retiró en 2021, lideró la investigación para determinar si los miembros de la campaña electoral de Trump en las elecciones de 2016 habían tenido contacto con agentes rusos, que finalmente concluyó que no había pruebas suficientes.