Redacción Deportes (EE.UU.), 20 jul (EFE).- La kazaja de origen keniano Noah Jeruto trabajó a fondo desde la salida en la final de 3.000 m obstáculos de los Mundiales de Eugene y obtuvo la recompensa a su esfuerzo con la medalla de oro en un tiempo de 8:53.02, el mejor en la historia de los campeonatos .
Jeruto se impuso en el esprint a dos etíopes, Werkuha Getachew, que se colgó la plata con 8:54.61 (récord nacional), y Mekides Abebe, que remontó desde posiciones más atrasadas para ganar la presea de bronce con 8:56.08 (marca personal).
La bahrainí Winfred Mutile Yavi, líder mundial del año con 8:56.55, flojeó en el último giro y se quedó fuera del podio, cuarta con 9:01.31.
La disciplina femenina de obstáculos presentaba una final abierta, pero Jeruto, fiel a su costumbre de imponer su ritmo, la endureció desde el disparo, imprimiendo sucesivos cambios de ritmo que terminaron por doblegar la resistencia de sus rivales.
El primer mil lo pasó en 2:57.27 y cuando cubrió el segundo en 5:58.29 ya solo quedaban tres arriba. La estadounidense Emma Coburn, campeona en 2017, se había rezagado un poco antes, y en el último mil fue progresando Abebe hasta alcanzar al trío delantero a 500 metros del final.
Jeruto recorrió el último mil en 2:54 y obtuvo una gran victoria, la primera para su país de adopción, mientras que la campeona olímpica, la ugandesa Peruth Chemutai, llegaba undécima.