Redacción Deportes, 23 mar (EFE).- Gregg Berhalter, seleccionador de Estados Unidos, afirmó este sábado que aunque su equipo es el campeón de la Liga de Naciones de la Concacaf, México es el que está presionado, en la final del certamen que ambas selecciones disputarán este domingo.
“No estamos presionados, para nosotros es una oportunidad. México jugó una gran semifinal y la presión es para ellos, nosotros sólo buscaremos dejar un legado en la Liga de Naciones porque sabemos lo que representa este torneo”, dijo el técnico estadounidense previo al duelo por el título que se realizará en el AT&T Stadium de Arlington, Texas.
Estados Unidos y México chocarán por segunda vez en la historia de este certamen en un duelo por el título, en la anterior los estadounidenses triunfaron en la primera edición.
Luego de un parón por la pandemia de COVID-19, en el 2023 el equipo estadounidense obtuvo su segundo título en la final ante Canadá y Berhalter subrayó su deseo de hilar un tercer título.
“Queremos ganar el tercer trofeo consecutivo y, como dije, dejar un legado, tengo un equipo con gran fuerza mental y mucha resiliencia; estamos a tope para ganar este partido”, señaló el estratega.
Sobre la desventaja que representará jugar ante una mayoría de aficionados mexicanos que acudirán al AT&T Stadium, que tiene capacidad para 80.000 seguidores, el estratega puntualizó que es algo que no preocupa a su equipo.
“Contra México es un partido especial. En Estados Unidos hay seguidores de muchos países, más de México, sabemos que van a ser ruidosos porque es una final, pero estamos preparados para ello”.
Gregg Berhalter destacó el desempeñó mostrado por México en la semifinal en la que eliminó a Panamá por 3-0.
“Ellos son más directos en ofensiva. Tienen extremos rápidos, pero nosotros tenemos gente que puede detenerlos. Es un equipo que no debemos permitir que marque rápido como lo hizo en la semifinal, ésa será la clave. Si los mantenemos en cero conforme avance el partido será complicado para ellos”, concluyó.