Nueva York, 12 feb (EFE).- Israel fue el responsable de más del 70 % de las muertes de periodistas en 2024, con un total de 85 profesionales de la información muertos por la acción del ejército israelí, según el último informe del Comité para la Protección de los Periodistas (CPJ), con sede en Nueva York.
Esta cifra supera a la de todos los demás muertos en otros conflictos o en otros estados, y ha contribuido a elevar enormemente el saldo final de este año con 124 profesionales de la información muertos violentamente.
De los 85 muertos a manos del gobierno israelí, 82 fallecieron en Gaza y los otros tres en el Líbano, y además la mayoría (82) eran palestinos.
Entre las víctimas se encontraban nombres como el de los palestinos Ismail Al Ghoul, de 27 añoS, y Rami Al Refee, que trabajaban para el medio árabe Al Jazeera, o Ahmed Abu Skheil y Wissam Kassem.
El año pasado, Israel justificó el asesinato de Al Ghoul afirmando que este era un agente de Hamás, ante lo que el CPJ indica que “la táctica de señalar a periodistas como terroristas sin mostrar pruebas es cada vez más adoptada tanto por regímenes autoritarios como por países supuestamente democráticos”.
Según el CPJ, los países más mortíferos para los periodistas, entre ellos Israel, “comparten un manual común que les ayuda a eludir responsabilidades y a negar la justicia a los periodistas asesinados”.
“Algunos reprimen la investigación de los incidentes, culpan a las propias víctimas, y la mayoría simplemente ignora su deber de exigir responsabilidades a los asesinos. Israel ha utilizado todas estas tácticas incluso antes de que comenzara la última guerra”, incide.
Y agrega que las investigaciones de Israel sobre las muertes violentas de periodistas a manos de sus soldados son “lentas y poco transparentes” y que a menudo se acusa a los periodistas de ser terroristas “sin pruebas creíbles”.
Esta actitud la copian otros países, como Sudán y Birmania, que tratan a los periodistas como enemigos en lugar de como civiles, o Siria, donde el régimen del expresidente Bashar Al Assad no ha rendido cuentas por perseguir y asesinar a periodistas durante años, apunta.
El año más mortífero para el sector periodístico
La guerra en Gaza propulsó las muertes de periodistas este año, convirtiendo 2024 en el año más letal para el sector desde que el CPJ recopila estas cifras -tres décadas-, con 124 periodistas asesinados.
Así, este año el número de periodistas asesinados ha ascendido un 22 % con respecto a 2023, un aumento impulsado por la guerra en Gaza, indica el CPJ.
Tras Israel, los países que asesinaron a más periodistas este año son Sudán (6), Pakistán (6), México (5), Siria (4), Birmania (3) y Haití (2).
De todos los periodistas muertos con violencia, 43 eran independientes (o ‘freelancers’, en inglés), un colectivo que frecuentemente “se enfrenta a un mayor peligro porque tiene menos recursos”, de acuerdo con el CPJ.
De este grupo, 31 fueron asesinados en Gaza, lo que supone 14 más que en 2023.
Según la organización, muchos periodistas que cubrían la guerra en Gaza tuvieron que hacerse ‘freelancers’ porque sus medios de comunicación fueron destruidos o porque el Estado hebreo prohibió a los trabajadores extranjeros entrar en la Franja sin una visita controlada del ejército.
Además, al menos 24 periodistas de todo el mundo fueron asesinados deliberadamente a causa de su trabajo, y en concreto en Gaza y Líbano hubo 10 trabajadores de la información que fueron atacados de manera premeditada por el gobierno israelí.
“Hoy es el momento más peligroso para ser periodista en la historia del CPJ. La guerra en Gaza no tiene precedentes en su impacto sobre los periodistas y demuestra un importante deterioro de las normas mundiales sobre la protección de los periodistas en zonas de conflicto, pero está lejos de ser el único lugar donde los periodistas están en peligro”, anota director ejecutivo del CPJ, Jodie Ginsberg.