Los Ángeles, 25 jul (EFE).- El incendio forestal cerca del Parque Nacional de Yosemite (California) ha continuado extendiéndose este lunes y su humo ya alcanza el área de la Bahía de San Francisco, afectando la calidad del aire de la región.
El incendio Oak comenzó el viernes pasado y ha crecido sin control y rápidamente debido a la seguía y las altas temperaturas que enfrenta Estados Unidos.
En la mañana de este lunes las llamas ya habían consumido 6.800 hectáreas (16.900 acres), mientras los bomberos han contenido apenas el 10 % del fuego en medio de la destrucción de viviendas y la evacuación de unas 6.000 personas, informaron las autoridades.
El humo del enorme incendio ha nublado al Área de la Bahía, ubicada a unos 250 kilómetros del incendio, lo que provocará que las autoridades extiendan un aviso de calidad del aire hasta el miércoles, según informa la televisora ABC.
Por su parte, la portavoz de la Casa Blanca, Karine Jean-Pierre, dijo este lunes en rueda de prensa que el presidente Joe Biden ha estado recibiendo actualizaciones periódicas del que se ha convertido en el mayor incendio de California en lo que va del verano.
Agregó que el mandatario ha dejado en claro que “si el Senado no actúa sobre el clima” la Administración anunciará nuevas acciones para ayudar a mitigar el riesgo de incendios forestales y abordar la crisis climática.
La agencia estatal Cal Fire indicó este lunes que se ha confirmado la destrucción de siete estructuras residenciales al tiempo que el incendio Oak (Roble) continúa “en condiciones cálidas, secas y en terreno agreste y empinado”.
Miles de residentes escaparon del incendio, uno de los cinco actualmente activos en California, en las laderas de la Sierra Nevada, una región que experimenta la peor sequía en décadas.
Cal Fire indicó que se han asignado a las labores 17 helicópteros, 281 camiones de bombeo, 66 excavadora, 46 camiones cisterna, y 2.548 bomberos en esfuerzos para proteger las viviendas de las llamas que en algunos sitios alcanzan 15 metros de altura.
El incendio comenzó el viernes al sudoeste del parque cerca de la localidad de Midpines en el condado Mariposa, y para el sábado las autoridades describían un “comportamiento explosivo del fuego”.
El gobernador de California, Gavin Newsom, ha declarado una emergencia estatal en ese condado donde más de 3.000 personas han evacuado sus casas. El servicio de electricidad en el área se interrumpió el viernes.
Las autoridades han ordenado la evacuación en algunos sectores del Condado Mariposa al sur y al este de donde las llamas siguen propagándose fuera de control.
California, al igual que la mayor parte de Estados Unidos, ha experimentado semanas de temperaturas muy altas, y en años recientes ese Estado en la costa Oeste ha sido escenario de incendios forestales más extensos.
El Centro Nacional de Incendios indicó esta mañana que 93 incendios grandes han quemado casi 1,3 millones de hectáreas en 5 estados, y se ha informado de un nuevo incendio mayor en Alaska, Arizona, Nebraska, Nevada y Texas.
El Servicio Meteorológico Nacional indicó que durante este lunes “probablemente seguirán batiéndose los récords diarios de altas temperaturas desde el norte de California hasta las áreas metropolitanas de Portland y Seattl”.
El denominado “incendio Roble” comenzó mientras los bomberos hacían progresos en su batalla con otro incendio anterior, denominado Washburn, que ardió en los lindes de un bosque de secuoyas gigantes en el extremo sur del Parque Nacional Yosemite.
“La vegetación es muy receptiva a nuevos incendios puntuales debido al clima cálido y seco y a la sequía. Los combustibles pesados, los vientos fuertes y la baja humedad también influyen en el comportamiento del fuego”, señaló la agencia californiana.
La agencia aún no ha determinado las causas del incendio.