Washington, 9 ene (EFE).- La vicepresidenta de EE.UU., Kamala Harris, apoyó este lunes al presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, durante la toma de juramento de la nueva embajadora estadounidense en el país suramericano, Elizabeth Bagley.
“Seamos claros, esto fue un ataque obvio y claro contra el proceso democrático”, dijo Harris durante la ceremonia en Washington.
“Le he dicho a la embajadora Bagley -agregó- que confío mucho en su capacidad de representar a EE.UU. y de proporcionar al presidente Lula todo lo que necesitemos en lo que se refiere al trabajo que haremos juntos como aliados”.
Harris subrayó que su Gobierno “está deseando ver” el trabajo de la embajadora con Lula.
En el acto, la vicepresidenta de EE.UU. fue preguntada si el expresidente brasileño Jair Bolsonaro, que se encuentra actualmente en Florida, debería ser extraditado, pero no contestó.
Bagley es una diplomática veterana que ha servido previamente como embajadora de EE.UU. en Portugal entre 1994 y 1997.
EE.UU. condenó de inmediato la violencia en el país suramericano, tras el asalto del domingo de miles de seguidores radicales de Bolsonaro a las sedes del Parlamento, la Presidencia y el Tribunal Supremo en Brasil.
Varios legisladores demócratas presionaron este lunes a Biden para que expulse de EE.UU. al exmandatario brasileño.
Bolsonaro decidió no estar presente en la ceremonia de investidura de Lula, como manda la tradición, el pasado 1 de enero en Brasilia, y voló antes a Florida (EE.UU.), siendo todavía presidente, en el avión presidencial.
El portavoz del Departamento de Estado, Ned Price, dijo hoy en una rueda de prensa que su país está a la espera de cualquier petición de ayuda de las autoridades de Brasil en las investigaciones relativas al ataque del domingo y Bolsonaro, aunque por el momento no ha recibido ninguna solicitud.