Miami, 6 sep (EFE).- Líderes de casi 200 albergues para mujeres pidieron este miércoles ayuda para atacar la “crisis nacional de salud pública” que constituye en Estados Unidos la creciente población de las personas “sin techo” (“homeless”), un urgente llamado al que se ha sumado la cantante Gloria Estefan.
“Toda ayuda suma”, dijo la intérprete cubanoestadounidense, quien fue una de las panelistas de la edición inaugural de la conferencia anual de la Red Nacional de Albergues para Mujeres (NWSN, por sus siglas en inglés) que hasta este viernes se celebra en Miami, en el sur de Florida (EEUU).
Estefan puso de relieve que un 80 % de las mujeres que se hallan en albergues son víctimas de violencia de género, un problema que se ha agravado en los últimos años, que son “tiempos difíciles” y que producen ansiedad y estrés entre las personas.
Por su parte, la presidenta de esta red de refugios para mujeres sin hogar, Constance Collins, señaló que el problema supone una “crisis nacional de salud pública” que alcanza “proporciones épicas” y que afecta a prácticamente todas las comunidades de Estados Unidos.
Collins, quien es también fundadora en Miami del albergue para mujeres Lotus House, manifestó que las últimas cifras que maneja la NWSN reflejan que cada año más de 1,2 millones de mujeres y 2,5 menores de edad “experimentan desamparo” en Estados Unidos, y que al menos 1 de cada 30 niños del país podrían quedar sin hogar, la mayoría de ellos menores de 10 años.
“Me parece inconcebible, pero la falta de vivienda se ha vuelto una norma para los niños de nuestro país, que es la nación mas rica y probablemente una de las mas poderosos del mundo”, se lamentó Collins.
Agregó que la violencia de género es la causa principal que lleva a las mujeres a quedarse “sin techo” y en el desamparo, pero no la única.
Entre los otros “factores contribuyentes” que han cobrado fuerza en los últimos años destacó la cada vez “más persistente” escasez de vivienda asequible en el país, un problema que ha derivado para los albergues del país en una “demanda inasumible”.
“Los albergues están sufriendo para poder abrir las puertas a más personas y poder poner comida en la mesa”, aseveró, tras lamentar que las políticas públicas dirigidas a la falta de vivienda asequible han fallado y en muchos casos hasta han colaborado en fijar las “raíces sistemáticas” que dan pie a las personas “sin techo”.
Pero no son las únicas razones. El aumento del coste de vida y la cada vez más difícil atención sanitaria, en especial cuando se trata de enfermedades mentales, son otro elementos a considerar a la hora de buscar soluciones efectivas.
Margaret Mitchell, de YWCA, en Washington, en ese sentido abogó por la urgente necesidad de elevar el salario mínimo a 25 dólares la hora en pos de “ingresos dignos”.
“Necesitamos ayuda”, invocó Collins, quien en una rueda de prensa dio a conocer una propuesta de hoja de ruta con los pasos necesarios para acabar con el desamparo en Estados Unidos.
Entre las medidas urgentes destacó la necesidad de incrementar los fondos, tanto públicos como privados, incluso los destinados a “reparaciones y mejoras capitales” en la red de albergues para mujeres que existen en la actualidad.
También se refirió a la necesidad de “un lote de viviendas permanentes, fácilmente disponibles, verdaderamente asequibles en todo nuestro país para personas de ingresos extremadamente bajos”.
La conferencia de la NWSN reúne en Miami, que como se destacó hoy está considerada entre las tres ciudades menos asequibles de EEUU, a líderes de albergues y expertos en la materia para a lo largo de cuatro días compartir prácticas en materia de desarrollo y operaciones de refugios, así como para identificar soluciones escalables.