Miami, 14 mar (EFE).- El estado de Florida fijó para el próximo 12 de abril la ejecución de Louis Bernard Gaskin, un reo condenado a la pena de muerte por un doble asesinato cometido en 1989 y por el que fue apodado el “ninja killer”.
La ejecución fue dictaminada a través de una orden firmada el lunes por el gobernador estatal, Ron DeSantis, y, de no prosperar las posibles apelaciones, será la segunda del año en este estado al cabo de una pausa desde 2019.
Gaskin fue sentenciado a la pena de muerte por asesinar el 20 de diciembre a Robert Sturmfels, de 56 años, y Georgette Sturmfels, de 55, a quienes disparó con un rifle en el domicilio de las víctimas, ubicado en el condado de Flager, en el noreste del estado.
También fue condenado por intento de asesinato a una pareja y por robo a mano armada, los cuales ocurrieron el mismo día de los hechos.
La prensa local lo apodó en ese entonces “ninja killer” (“el ninja asesino”) porque vestía indumentaria negra de ninja al momento de cometer los crímenes.
La policía encontró en el domicilio de Gaskin, quien confesó con rapidez ser el autor de los asesinatos, objetos que habían sido robados del domicilio de las víctimas mortales y que pretendía dar como regalos de navidad a su novia de ese entonces.
Con ocho votos a favor y cuatro en contra, el jurado recomendó en 1990 la pena capital para Gaskin, que fue la sentencia que el magistrado finalmente le impuso.
De acuerdo a las actuales leyes de Florida, se requiere unanimidad del jurado para que un juez dictamine la pena de muerte, lo cual va en línea con lo que establece la Corte Suprema de EE.UU., que considera inconstitucional la condena por mayoría simple.
La ejecución de Gaskin está prevista para las 6.00 de la tarde, hora local (23.00 GMT), del 12 de abril.
Será la segunda del año, tras la inyección letal que se le aplicó el pasado 23 de febrero a Donald Dillbeck, de 59 años, en la Prisión Estatal de Florida.
Dillbeck había sido condenado por dos asesinatos en primer grado, el primero cometido con arma de fuego en 1979 cuando era menor de edad y otro a puñaladas en 1990.
Fue la primera ejecución que se llevó a cabo en Florida desde 2019 y la número 100 desde que se restableció la pena capital en este estado en 1976.
Dillbeck fue condenado a muerte en 1994 por el asesinato de Faye Vann, una mujer de 44 años que se resistió al robo de su auto en un garaje de Tallahassee, la capital de Florida, y a la que el entonces prófugo de la justicia apuñaló.
Antes se había fugado de una granja-prisión donde cumplía cadena perpetua por el asesinato a tiros del policía Dwight Lynn Hall, de 31 años, cometido en 1979, cuando tenía solo 15 años.