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Con la llegada del verano, el fiscal del condado de New Hanover, Jason Smith, está alertando a la comunidad sobre los riesgos mortales que representan los autos calientes.
Smith recordó que la temperatura dentro de un vehículo puede alcanzar hasta 150 grados Fahrenheit durante los días soleados, lo que puede ser fatal en cuestión de minutos si un niño o un animal queda dentro.
Desde 1998, más de 1,000 niños han muerto en Estados Unidos por golpes de calor relacionados con vehículos, incluyendo un caso ocurrido en Wilmington en 2016.
RECOMENDACIONES
El fiscal instó a los padres y cuidadores a tomar precauciones como dejar objetos importantes (como una cartera, teléfono o billetera) junto a la silla del niño para forzarse a revisar el asiento trasero antes de salir del auto.
“Piense antes de decidir dejar a un niño en el auto, aunque sea por un minuto. Solo un minuto puede cambiarle la vida”, advirtió Smith. Además, enfatizó la importancia de siempre cerrar los autos con llave al salir.
Aproximadamente el 25% de las muertes por golpe de calor en autos se deben a que los niños entran solos al vehículo y quedan atrapados dentro.