Nueva York, 30 dic (EFE)- El FBI se ha unido a la investigación del caso de Robert Brooks, un reo afroamericano que murió este mes víctima de una paliza propinada por un grupo de carceleros en una prisión de Nueva York, según mostró un vídeo dado a conocer por la Fiscalía general del estado que ha causado gran impacto.
Por su parte, la gobernadora del Estado de Nueva York, Katy Hochul, dio orden de empezar el proceso de despido de los involucrados.
“La Oficina de Campo del FBI en Albany y el Departamento de Justicia están revisando los hechos y circunstancias que rodearon la muerte de Robert L. Brooks para determinar la respuesta federal apropiada”, indicó el FBI en un comunicado enviado a los medios locales. La Fiscalía de Nueva York también ha anunciado una investigación por su lado
Unos trece guardias de la prisión han estado envueltos en la paliza a Brooks, que tuvo lugar en la enfermería del Centro Correccional Mercy, al norte del estado, donde había sido trasladado ese mismo día del incidente, el 9 de diciembre. Brooks murió al siguiente día.
El vídeo, obtenido de las cámaras que portaban cuatro de los agentes y que no tiene sonido, muestra cómo estos golpean y patean a Brooks, que estaba esposado con sus manos en la espalda y al que luego pusieron esposas en sus pies.
Revela además cómo los guardias sostienen a Brooks y uno de ellos le da patadas en la parte inferior de su cuerpo con su zapato. Otro golpeó en la parte superior, mientras se turnaban para agredirlo. Otros guardias observaban sin hacer nada así como dos que vieron lo que ocurría desde el pasillo.
Datos preliminares de la autopsia indican que Brooks sufrió fracturas y lesiones en los tejidos blandos de la parte superior del cuerpo, la ingle, el cuello y la cabeza, y que pudo haber muerto como resultado de “asfixia debido a la compresión del cuello”, señala el diario Times Union.
De acuerdo con un artículo del New York Times, tres de los guardias involucrados en la paliza a Brooks -uno de ellos es un sargento- habían participado en ataques similares a otros reos en cárceles del estado. Y también han sido demandados en casos aún sin resolver en una corte federal en Nueva York por ataques que dejó a un reo en silla de ruedas y a otro con el rostro desfigurado, según las demandas que cita el diario.
Proceso de despidos
Por su parte la gobernadora del estado, Kathy Hochul, visitó hoy la prisión donde Brooks fue golpeado y se reunió con el jefe del Departamento de Corrección (penales), Daniel Martuscello, a quien dio órdenes para iniciar el proceso de despido de los guardias que participaron en la paliza del afroamericano, y también escuchó a varios reos que actuaron como portavoces de la población penal de ese centro.
Hochul anunció varias acciones correctivas inmediatas después de su visita, como la inversión de 400 millones de dólares para instalar cámaras fijas y distribuir cámaras corporales en todas las prisiones del estado así como aumentar el personal en la Oficina de Investigaciones Especiales.
También ordenó una investigación “inmediata y completa” sobre la muerte de Brooks.