Miami, 15 ene (EFE).- El exilio y la oposición cubana calificaron este miércoles de “concesión” la decisión de la Administración del presidente de EE.UU., Joe Biden, de retirar a Cuba de la lista de países promotores de terrorismo, una medida que solo beneficiará al “régimen” y no al pueblo de la isla caribeña, según dijeron.
La Casa Blanca comunicó el martes la decisión del demócrata de retirar a Cuba de este listado que conlleva severas sanciones económicas, una medida que toma a menos de una semana de ser relevado por Donald Trump.
“Es una oportunidad perdida para promover los cambios estructurales que el pueblo cubano demanda”, señaló hoy Pasos de Cambio, una plataforma que reúne a organizaciones opositoras de dentro y fuera de la isla, y que estimó que la medida solo va a fortalecer a la “dictadura”.
“No hay justificación técnica para retirar a Cuba de la lista. Está más que documentado el apoyo que el régimen da a terroristas”, enfatizó Rosa María Payá, directora de la organización Cuba Decide, durante una teleconferencia celebrada hoy.
Por su parte, Orlando Gutiérrez Boronat, de la Asamblea de la Resistencia Cubana (ARC), dijo que el anuncio de Biden “va en contra de la realidad”, en vista que de que el Gobierno del presidente cubano, Miguel Díaz-Canel “tiene un historial de apoyo al terrorismo”.
“Me encantan que excarcelen a presos políticos, pero no deja de ser una maniobra del régimen”, señaló Gutiérrez Boronat, quien explicó que el Gobierno en la isla caribeña tiene “bien aprendido que secuestrando gente pueden ganar ganancias políticas, es un juego terrible”.
La sede del Directorio Democrático Cubano albergó este miércoles una rueda de prensa a cargo de varias organizaciones del exilio, las cuales mostraron su rechazo a lo que calificaron de “enormes concesiones a cambio de nada” por parte de la saliente Administración de la Casa Blanca, una suerte de acuerdo que usa como “ficha de intercambio” la excarcelación de presos.
Hicieron hincapié además en que ello no implica necesariamente la puesta en libertad de presos políticos. “Tenemos que ver los nombres, pero no le creemos nada a este régimen”, manifestó Gutiérrez Boronat.
Este mismo miércoles, el Gobierno de Cuba inició las excarcelaciones de más de 500 presos que anunció la víspera tras la decisión de Washington, según ha podido confirmar EFE.
Entre las primeras personas que han salido de prisión se encuentran Dariel Cruz García, Lisdiany Rodríguez Isaac y Donaida Pérez Paseiro, considerados presos por motivos políticos según las principales ONG sobre derechos humanos en Cuba.
Marcha en pro de 'acciones, no palabras'
Pasos de Cambio ha convocado para el próximo 28 de enero a la “jornada mundial por y para los cubanos” llamada 'Acciones, no palabras', que consistirá en una manifestación principal en Washington, y con réplicas frente a las embajadas de Estados Unidos en varias ciudades del mundo.
En la marcha en la capital estadounidense, los convocantes harán entrega a la Administración entrante del presidente electo, el republicano Donald Trump, de un memorando con cinco puntos prioritarios en torno a la política que EE.UU. debe tener hacia Cuba.
Un memorando que ya había entregado a la Administración de Biden y que como segundo punto señala la necesidad de que EEUU mantenga “el estatus del régimen cubano como estado patrocinador del terrorismo”, un pedido que “ayer ha sido burlado”, como dijo Payá.
La activista, hija del fallecido líder opositor Oswaldo Payá, uno de los fundadores del Movimiento Cristiano Liberación, resaltó que una de las principales consecuencias del anuncio de Washington será el “empoderamiento directo de los dictadores” en momentos en que “el pueblo cubano sufre una crisis sin precedentes”.
Al eliminarse las sanciones permitirán “el financiamiento de los militares que usan esos fondos para represión y empobrecimiento del pueblo”, señaló. “No hay forma de que eliminando sanciones a militares que reprimen y extraen recursos al pueblo cubano se pueda ayudar a la población”, agregó.
“La capacidad represiva del gobierno cubano está intacta y seguirá intacta”, ahondó.
Los opositores y activistas miran con esperanzas al próximo Gobierno de Trump, cuyo nominado a secretario de Estado, el senador de origen cubano Marco Rubio, dijo hoy que tenía “cero dudas” de que Cuba “cumple con todos los requisitos para ser considerado un Estado patrocinador del terrorismo”.
Durante su audiencia de confirmación ante el Senado, Rubio avisó de que se puede revertir la decisión tomada ayer por la Administración saliente de Joe Biden de retirar a la isla del listado.