Washington, 13 may (EFE).- Un jurado investigador en Wisconsin acusó a una empresa molinera por la violación de leyes de seguridad laboral que causó una explosión en 2017 en la cual murieron cinco trabajadores, dos de ellos hispanos, informó hoy viernes el Departamento de Justicia.
Ángel Reyes y Carlos “Charly” García fueron dos de las víctimas fatales en la explosión el 31 de mayo de 2017 en la planta Didion Milling (DMI) de molienda de maíz en Cambria, Wisconsin, en la cual resultaron heridos otros 16 trabajadores.
La molienda de maíz produce polvo que es combustible y bajo ciertas condiciones es explosivo y, según el informe de la Junta de Investigación de Seguridad Química, los trabajadores habían dado cuenta de humo y olor y habían hecho una inspección en la media hora previa a la explosión.
Poco antes de la medianoche ocurrió al menos una explosión que causó el colapso de los nueve edificios en la planta, en tanto que otros cinco edificios registraron daños graves.
Una investigación de la Oficina de Sanidad Laboral encontró que dos días antes del incidente había ocurrido un incendio en una plataforma de secado, y que la compañía había acumulado citaciones desde 2011 incluida una por falta de prevención de explosiones en las unidades de recolección de polvo.
El jurado federal investigador encausó a la compañía molinera, un vicepresidente, dos coordinadores ambientales y otros tres supervisores por crímenes relacionados con la seguridad laboral, fraude, contaminación del aire y obstrucción del proceso judicial.
Según la acusación, DMI tenía la obligación de limpiar regularmente las acumulaciones de polvo dentro del molino y de operar y mantener aparatos de control de la contaminación del aire, pero no cumplió con esos requisitos.