Washington, 26 jun (EFE).- El Tribunal Supremo estadounidense reconoció este miércoles que subió por error a su página web un documento sobre un relevante caso en el que se estudia la legalidad de los abortos de emergencia en el estado de Idaho, opinión que no ha sido publicada oficialmente.
“La unidad de publicaciones de la Corte subió inadvertida y brevemente un documento al sitio web de la Corte”, apuntó la portavoz de la Corte Suprema, Patricia McCabe, en un comunicado.
Dicha opinión, según el documento obtenido por Bloomberg, parece indicar que los jueces del máximo tribunal serían favorables a que se permita el acceso a los abortos de emergencia.
En el comunicado, McCabe recordó que la opinión “no ha sido publicada” y que se emitirá “a su debido tiempo”.
No es por tanto una opinión cerrada pues, señala la prensa estadounidense, por tradición y según las reglas del tribunal, los jueces pueden cambiar de parecer hasta el momento de su publicación.
Según CNN, esta es la segunda vez en dos años que el tribunal publica prematuramente una decisión importante relacionada con un caso de aborto.
Hace dos años, el diario Politico obtuvo un borrador de la opinión del tribunal superior que revocaba Roe v. Wade, un documento que era sustancialmente el mismo que la opinión final que el tribunal publicó semanas después.
Desde que en junio de 2022 el máximo tribunal estadounidense, de mayoría conservadora, eliminó la protección federal al aborto al anular el fallo ‘Roe contra Wade’, decenas de estados -Idaho entre ellos- han llevado a cabo un ataque frontal contra los derechos de las mujeres al implementar restrictivas leyes contra el aborto.
Ese mismo año, la Administración del actual presidente estadounidense, Joe Biden, demandó al estado de Idaho -donde el aborto está prohibido en todas las etapas del embarazo- alegando que las restricciones a este procedimiento están reguladas en parte por la ley federal y no se pueden interponer cuando se trata de salvar la vida a las embarazadas.
Para defender esta postura, se invocó la Ley de Tratamiento Médico y Trabajo de Urgencia (EMTALA), de 40 años de antigüedad, que obliga a los hospitales que reciben fondos federales a prestar atención médica de emergencia a cualquier persona, también por cuestiones reproductivas.