Washington, 20 ene (EFE).- El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, hizo una broma sobre el comentado sombrero de la primera dama, Melania Trump, en su primer discurso fuera del Capitolio tras ser investido este lunes: “Casi vuela por los aires. Estaba siendo levantada del suelo” por el viento, expresó.
El accesorio de Melania Trump fue uno de los atuendos más comentados y motivó una de las imágenes de la ceremonia de investidura porque el ala dura del sombrero, diseñado por Eric Javits, de color negro con una banda blanca, impidió que su marido le dé un beso en la mejilla.
A Melania le costó sostenerlo mientras el presidente saliente Joe Biden y su esposa Jill abordaban el helicóptero que los trasladó de Washington a la base militar de Maryland, tras abandonar la Casa Blanca.
Sin embargo, no fue la única prenda controvertida durante la jornada. El senador demócrata por Pensilvania John Fetterman, conocido por vestir con ropa deportiva en sus apariciones públicas, fue el centro de las miradas por asistir a la inauguración con unos pantalones cortos grises -la temperatura en Washington estaba bajo cero- y una sudadera negra.
La prometida del multimillonario dueño de Amazon, Jeff Bezos, Lauren Sánchez, también fue señalada en redes sociales por su selección de traje de chaqueta. La pareja del empresario lució un traje de Alexander McQueen, pero en vez de una blusa interior debajo se mostraba un corsé de lencería de encaje blanco.
Los atuendos monocromáticos también lucieron este lunes en el evento. Jill Biden vistió enteramente de púrpura, con un traje, abrigo zapatos y guantes de ese color. Mientras que la segunda dama, esposa del vicepresidente J.D. Vance, Usha Vance, lució tonos rosas y la hija mayor de Trump, Ivanka, vistió de verde oscuro.