Miami, 26 mar (EFE).- El primer ministro de Antigua y Barbuda, Gaston Browne, negó que Sean ‘Diddy’ Combs hubiera aterrizado en esa isla caribeña el lunes en medio de los allanamientos que hicieron agentes de EE.UU. a propiedades del rapero en Miami y Los Ángeles como parte de una investigación al parecer relacionada con trata de personas.
“No hay información creíble de que esté aquí. Al contrario, no llegó ayer en el vuelo a Antigua”, dijo Browne a Newsweek.
En un mensaje enviado este martes a EFE, el portavoz en Miami de la agencia de Investigaciones de Seguridad Nacional (HSI) señaló que esa agencia del Departamento de Seguridad Nacional (DHS, en inglés) realizó los allanamientos como parte de una caso que lleva a cabo en Nueva York.
Sin embargo, no ofreció detalles sobre la investigación ni el paradero del magnate del hip-hop, de 54 años.
Medios del entretenimiento han especulado que el artista voló en su jet privado a Antigua.
Agentes federales allanaron el lunes una lujosa vivienda de Holmby Hills, en Los Ángeles, como también una propiedad del cantante en la exclusiva Star Island, una isla artificial de Miami Beach, en Florida.
“Ayer hubo un grave uso excesivo de la fuerza a nivel militar cuando se ejecutaron órdenes de allanamiento en las residencias del Sr. Combs”, censuró hoy en un comunicado Aaron Dyer, abogado del rapero, y afirmó que “no hay excusa para la demostración excesiva de fuerza y hostilidad exhibida por las autoridades”.
Criticó además Dyer “la forma en que fueron tratados sus hijos y empleados”, recogieron medios nacionales.
La redada en las propiedades hacen parte de una investigación federal sobre trata de personas contra el rapero iniciada en Nueva York, aseguraron fuentes federales al canal ABC.
A finales de 2023 Combs fue demandado en cuatro ocasiones por supuesta violación, la última querella presentada el 6 de diciembre asegura que el rapero drogó en su estudio de Nueva York y violó a una menor de edad.
La demanda era similar a la entablada por Casandra Ventura, la cantante de R&B conocida como Cassie y exnovia de Combs, quien lo acusó de violarla y golpearla a lo largo de una década. Los dos lograron un acuerdo monetario pocos días después de presentada la querella legal.
Combs ha negado las acusaciones que enfrenta y dijo en diciembre pasado en una publicación de Instagram que las demandantes “intentaban difamarme, destruir mi reputación y mi legado”.
Varias de las demandas se hicieron bajo el amparo de la Ley de Víctimas de Violencia de Género de Nueva York.