Nueva York, 9 may (EFE).- El Museo Metropolitano de Nueva York (Met) anunció este martes un plan para fiscalizar el origen de sus obras en vista del creciente escrutinio de las autoridades en los últimos años y el aumento de devoluciones de antigüedades que fueron expoliadas de sus países.
El director de la institución, Max Hollein, divulgó hoy en una carta que el Met va a incorporar un equipo de cuatro personas para analizar el origen de sus obras, y que reforzará ese trabajo en el caso de aquellas que provengan de marchantes de arte que han sido investigados.
Hollein estimó que la fiscalización afectará a “varios cientos” de piezas, la mayoría de las cuales llegaron a la colección entre 1970 y 1990, en un periodo de gran crecimiento en el museo en el que “había menos información disponible y menos escrutinio” sobre su origen.
El Met, que cuenta con una de las colecciones más amplias del mundo, con 1,5 millones de obras que abarcan 5.000 años de Historia, ha devuelto en los últimos años antigüedades que habían sido saqueadas de Egipto, Grecia, Italia, Nepal, Nigeria o Turquía, tras investigaciones de las autoridades.
“Al Met le incumbe examinar más intensa y proactivamente ciertas áreas de la colección e incrementar los recursos que dedicamos a este trabajo crucial”, señaló en la nota el director, que insistió en que ya cuenta con un equipo de expertos fiscalizador en su plantilla y que el nuevo equipo es “adicional”.
El Met también ha formado un comité de 18 comisarios, conservadores y técnicos para que revise las políticas y prácticas del museo y que asesore a la plantilla y a la junta de patronos de la institución en cuestiones de origen.
Aparte de esos esfuerzos, el Met busca posicionarse al frente de las discusiones sobre la “propiedad cultural” y prevé reunir a activistas y “generadores de opinión” sobre ese tema, dentro y fuera del museo, con informes, alianzas y actividades, indica la carta.