Washington, 4 abr (EFE).- El juez Scott McAffee, encargado del caso abierto en Georgia contra el expresidente de Estados Unidos Donald Trump (2017-2021) por injerencia electoral, rechazó este jueves su petición de desestimarlo.
El magistrado alegó que la defensa no ha podido demostrar que sus declaraciones y presunta conducta estén protegidos por la libertad de expresión y subrayó que la corte tampoco ha encontrado pruebas que defiendan esa tesis.
El equipo del republicano se había apoyado en la Primera Enmienda de la Constitución de Estados Unidos, que protege el derecho a la libertad de expresión.
Trump y otros 18 cómplices están acusados en Georgia de formar una asociación delictiva con el objetivo de darle la vuelta en ese estado a los resultados de las presidenciales de 2020, que ganó el demócrata Joe Biden.
La acusación de asociación delictiva esgrimida por la fiscal de distrito Fani Willis es la misma que ha sido utilizada por otros fiscales en el pasado para descabezar organizaciones mafiosas.
McAffee ya había rechazado peticiones similares que otros acusados habían hecho en este caso intentando ampararse en la Primera Enmienda.
El juicio en Georgia todavía no tiene fecha. La fiscal ha apuntado que ella estaría lista para agosto, pero el magistrado no se ha pronunciado.
De los cuatro casos penales en su contra, está previsto que el primero en empezar, el 15 de abril, sea el de Nueva York por pagos electorales irregulares a la actriz porno Stormy Daniels para comprar su silencio durante la campaña de 2016.
En Washington tiene abierto otro también por injerencia electoral, mientras que en Florida está imputado por llevarse de la Casa Blanca al abandonar el poder documentos clasificados, que guardó en su mansión de Mar-a-Lago.