Washington, 2 jun (EFE).- El autor de un ataque incendiario en Boulder, estado de Colorado, contra un grupo de gente que pedía el domingo la liberación de los rehenes detenidos en Gaza encara la posibilidad de acabar en prisión de por vida, según explicó este lunes en rueda de prensa el fiscal federal J. Bishop Grewell.
“Mi oficina ha acusado a Mohamed Sabry Soliman, de 45 años, de la comisión de un delito de odio”, explicó Bishop Grewell, que apuntó que “cuando ese delito incluye intento de asesinato, la pena federal máxima legal es cadena perpetua”.
El fiscal aseguró que Soliman “había planeado este ataque durante un año y actuó porque odiaba lo que llamaba el grupo sionista”.
“Cuando fue entrevistado sobre del ataque, dijo que quería que todos murieran”, añadió.
Según explicó Bishop Grewell, al ser interrogado Soliman no mostró arrepentimiento, dijo “que lo volvería a hacer” y contó que había intentado comprar un arma de fuego, pero que recurrió a los cócteles molotov al no poder adquirirla por no tener la ciudadanía estadounidense.
El domingo Soliman supuestamente atacó con un lanzallamas casero y cócteles molotov a un grupo de personas que se encontraban reunidas en un acto de solidaridad con los rehenes que permanecen en manos de Hamás en la Franja de Gaza y aparentemente gritó después “¡Palestina libre!”.
Las autoridades elevaron hoy el número de víctimas de ocho a 12 a causa del ataque, que mantiene a dos personas aún hospitalizadas por sus heridas, y el fiscal del distrito en Boulder, Michael Dougherty, contó que la policía halló que Soliman tenía a su disposición otros 16 cócteleles molotov sin usar, lo cual, indicó, “habla por sí solo”.
Dougherty añadió que Soliman comparecerá hoy mismo en la cárcel ante el juez, que ha fijado para él una fianza de 10 millones de dólares.
Soliman, que según diversos medios tiene nacionalidad egipcia, entró en EE.UU. en agosto de 2022 con un visado de turista que expiró en febrero de 2023, según ha dicho el Departamento de Seguridad Nacional.
Este ataque se ha producido menos de dos semanas después del asesinato de dos empleados de la embajada de Israel en Washington D.C., perpetrado por un joven que también expresó su apoyo a Palestina tras abrir fuego contra las víctimas.
El ataque del domingo llevó hoy al presidente Donald Trump a condenar el ataque en su red social Truth Social, donde aseguró que Soliman “entró al país gracias a la ridícula Política de Fronteras Abiertas” de su antecesor, Joe Biden, y prometió expulsar al supuesto atacante “bajo la política de Trump”.
Desde su retorno al poder en enero, Trump se ha comprometido a endurecer la política migratoria del país, lo que incluye deportaciones a gran escala de migrantes en situación irregular.