Washington, 1 abr (EFE).- Estados Unidos mostró este lunes su preocupación por la decisión de Parlamento israelí de aprobar una ley que prohíbe de forma temporal la retransmisión en Israel de cualquier medio extranjero que “dañe la seguridad del Estado” y que busca limitar las informaciones sobre la guerra en Gaza del canal catarí Al Yazira.
“Una acción como esta es preocupante. Creemos en la libertad y Estados Unidos apoya el trabajo de importancia crítica que realizan los periodistas en todo el mundo y eso incluye a aquellos que informan sobre el conflicto en Gaza”, apuntó en la rueda de prensa diaria la portavoz de la Casa Blanca, Karine Jean-Pierre.
La libertad de prensa “es importante” y por eso esta decisión “preocupa” al Gobierno de Joe Biden, agregó.
A través de la red social X, el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, afirmó que “el canal terrorista Al Yazira ya no transmitirá desde Israel”. “Tengo la intención de actuar inmediatamente de acuerdo con la nueva ley para detener la actividad del canal”, apuntó.
Esta ley otorga al ministro de Comunicaciones el poder de ordenar a los “proveedores de contenidos”, por un plazo renovable de 45 días, el fin de su retransmisión desde el país; además del cierre de sus oficinas, la confiscación de sus equipos y el bloqueo del servidor de su página web.
El ministro israelí de Comunicaciones, Shlomo Karhi, aseguró que “no habrá libertad de expresión para los portavoces de Hamás en Israel” y que “Al Yazira cerrará en los próximos días”.
Al Yazira es uno de los canales con mayor despliegue y periodistas en la Franja, y desde octubre ha informado sobre bombardeos de hospitales, ataques contra edificios residenciales y la muerte de gazatíes no armados, lo que según expertos podrían ser crímenes de guerra.
Varios de sus periodistas han muerto en ataques israelíes – como Hamza Wael Dahdouh y Mustafa Thuria, cuyo vehículo fue impactado por un misil cuando circulaban por el sur de Gaza- mientras que corresponsales estrella como Wael Dahdouh han perdido a la mayoría de sus familiares, incluido su hijo primogénito y periodista, Hamza.
Por otro lado, la portavoz estadounidense también se posicionó sobre la retirada del Ejército israelí de sus tropas del hospital Shifa, en ciudad de Gaza, tras dos semanas de asalto.
Esas tropas han dejado un rastro de destrucción con muchos edificios quemados y, además, las autoridades gazatíes han reportado cuerpos calcinados y en descomposición en el centro, que ha quedado fuera de servicio.
Jean-Pierre afirmó que si esta información sobre los cuerpos calcinados y en descomposición se confirma como verídica, será “profundamente preocupante”.